Varias de las situaciones geopolíticas que tienen en vilo a los mercados desde hace muchos meses han visto algo de luz, caso de un Brexit duro o de la solución a la guerra comercial entre China y EE.UU., de modo que los inversores han podido tomarse un respiro. La temporada de resultados del tercer trimestre, en general, no ha decepcionado y eso lleva a los expertos de Fidelity a considerar que la situación global de los bonos high yield es “a todas luces más favorable a tenor de las políticas expansivas de los bancos centrales y el descenso de la incertidumbre política”, asegura Andrea Iannelli, director de inversiones en renta fija de Fidelity International, pese a reconocer que la debilidad macro sigue ahí, especialmente en el sector manufacturero mundial.
¿Donde mirar?
La gestora ha elevado su visión sobre los bonos high yield europeos a positiva desde neutral y, dentro de ellos, cree que “los títulos en libras esterlinas son atractivos, sobre todo en lo que respecta a sus diferenciales frente a otras regiones”. En Fidelity creen que se puede invertir de nuevo en Reino Unido, ahora que se ha alejado la posibilidad de un Brexit duro. “Las empresas británicas han quedado rezagadas desde el referéndum del Brexit y puesto que los impagos se han debido en su mayor parte a motivos particulares, el hecho de que estas empresas hayan vuelto al mercado en fechas más recientes para captar financiación ha sido acogido favorablemente por los inversores”, subraya Iannelli.
Aunque en la gestora son conscientes de la volatilidad que pueden sufrir este tipo de bonos, “los fundamentales y los factores técnicos de la región siguen siendo favorables, ya que las empresas están limitando las emisiones de bonos a refinanciaciones, en lugar de operaciones más agresivas como las recompras de acciones o las fusiones y adquisiciones”.
Con respecto a los bonos high yield asiáticos consideran que deberían verse apoyados por las medidas expansivas de los bancos centrales del continente, por las expectativas más optimistas en torno a la guerra comercial y por la posibilidad de estímulos presupuestarios en China.
Por lo que toca a este tipo de bonos pero del mercado estadounidense, en Fidelity International destacan que la recuperación general ha hecho que “los bonos high yield estadounidenses con calificación BB descuenten ya un rebote del crecimiento y los beneficios”. Eso sí, también subrayan la señal de advertencia que suponen “los elevados niveles de dificultades financieras y dispersión en el segmento de inferior calidad del mercado”. En este sentido, mantienen una postura neutral sobre la deuda high yield estadounidense, ante unas valoraciones que muestran diferenciales próximos a la parte baja de la horquilla y ante unos catalizadores escasos para que los diferenciales sigan estrechándose.
1970-01-01 00:00:00