Pausa arancelaria de 90 días salvo para China

Estados Unidos vuelve al arancel base del 10%, menos para China que se enfrenta a un 125%.
Donald Trump Donald Trump
Donald Trump

La cuestión de los aranceles no para. Menos de 24 horas después de que entrara en vigor el nuevo paquete que imponía nuevos impuestos a los países con mayor superávit comercial, Estados Unidos ha dado marcha atrás, por el momento, y ha decidido poner en pausa los aranceles.

No serán todos, pues el presidente Trump ha anunciado que el 10% de base que entró en vigor el pasado fin de semana se mantendrá pero durante 90 días habrá una tregua en los demás. Para todos, salvo para China que no solo mantendrá las nuevas tasas si no que ha visto como éstas han crecido. Ahora son del 25%

Donald Trump ha justificado la medida argumentando que «la gente se estaba poniendo nerviosa» y más de 70 países ya habían pedido negociar los nuevos gravámenes. De este modo, todas aquellas naciones que no habían tomado represalias por las medidas de la Casa Blanca se libran, de momento, de ese aumento.

Esta prórroga incluye a la UE que, unas horas antes, había adoptado contramedidas económicas que debían entrar en vigor el próximo 15 de abril. Por el momento, se desconoce si desde Bruselas se dará marcha atrás pero Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ya ha asegurado que se trata de «un paso importante para estabilizar la economía mundial».

Guerra comercial bilateral

Así las cosas, la guerra comercial arancelaria parece reducida a dos actores: EE.UU. y China.

Desde el primer anuncio de tasas recíprocas, Pekín respondió de inmediato imponiendo las suyas e iniciando una escalada que ha lleva al 125% actual desde Estados Unidos.

Trump, directamente, ha acusado al país asiático de «falta de respeto» a los mercados internacionales. «En algún punto, ojalá en el futuro cercano, China se dará cuenta que los días de estafar a EE.UU. y a otros países ya no es ni sostenible ni aceptable», ha añadido.

La comunidad empresarial ya ha manifestado su inquietud ante la posibilidad de que estos aranceles repercutan en las cadenas de suministro globales y eleven los costos tanto para consumidores como para empresas. Apple, Nike, Oracle, Dell… son algunas de las compañías que tienen buena parte de su producción en China y que podrían tener que elevar sus precios o cambiar su modelo productivo.

Aunque se espera una respuesta por parte del gobierno de Xi Jinping, las autoridades chinas aún no se han pronunciado. Desde Estados Unidos están seguros de que «se llegará a un acuerdo con China».

Según expertos, detrás de esta escalada podría estar TikTok. Trump quiere, a toda costa, que deje de estar en manos chinas y aunque la empresa de vídeos cortos ha recibido ofertas jugosas por parte de algunas de las «Big Tech» la última palabra la tiene Pekín.

Add a comment

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *