La multinacional automovilística Stellantis, que tiene una planta en Vigo, ha solicitado a las empresas auxiliares del sector que refuercen su «esfuerzo de competitividad». Alfonso Rueda, presidente de la Xunta, ha indicado que Stellantis desea que estas empresas «participen» activamente en el esfuerzo que ya lleva a cabo la fábrica gallega para sostener su posición en el mercado.
Rueda se reunió con Jean-Philippe Imparato, director de operaciones de Stellantis para Europa, en Turín. Durante una entrevista publicada en el diario Faro de Vigo, subrayó que Stellantis necesita que las industrias auxiliares ofrezcan «un producto de calidad a un precio asequible» para poder competir de manera efectiva.
Imparato hizo hincapié en la relevancia de que España presione a la Unión Europea para que suavice las normativas que inciden en la industria automovilística. Según él, las regulaciones actuales generan sobrecostes que complican la competencia con China y «ponen en peligro la industria de la automoción en Europa».
Rueda manifestó su confianza en el futuro del sector automotriz en Galicia, siempre que la Xunta mantenga su apoyo a las empresas para que puedan ser competitivas. Destacó que la Xunta tiene «un plan de 230 millones para la industria de la automoción, de los cuales 75 millones están destinados a ayudar a la industria auxiliar a mejorar su competitividad, reduciendo costes».
En lo que respecta a la infraestructura, Rueda solicitó un mayor desarrollo del corredor ferroviario para mercancías en el noroeste de España y más inversiones en conexiones eléctricas de alta tensión. Además, hizo un llamado a reformar el sistema de financiación autonómica para optimizar las condiciones del sector.
Sobre la demografía, Rueda afirmó que la inmigración «se está demostrando como la solución más eficaz» para abordar la crisis demográfica en Galicia. Con un crecimiento vegetativo negativo, considera necesario atraer nuevos residentes, especialmente de origen gallego, dado que «con la población que hay aquí no se pueden cubrir» las vacantes laborales.
Por último, Rueda criticó la ausencia de «planificación» por parte del Gobierno central en políticas migratorias y solicitó que la Xunta tenga «capacidad para otorgar permisos de trabajo». Esta medida busca facilitar la llegada de nuevos trabajadores que satisfagan la demanda laboral en la región.