La Unión Europea (UE) y Estados Unidos han optado por intensificar sus diálogos en busca de un consenso en torno a los aranceles. Esta iniciativa se produce a raíz de las tarifas impuestas por el presidente de EE. UU., Donald Trump, que han impactado las relaciones comerciales con diversas naciones.
Se anticipa que el acuerdo que se alcance será más ventajoso que los previos pactos establecidos por Washington con Londres y Pekín.
El comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, hizo un anuncio durante una conferencia de prensa, celebrada tras una reunión de ministros de la unión. Allí, ha destacado que las conversaciones han cobrado mayor fuerza. Se abordaron «las áreas potenciales en las que un acuerdo podría empezar a tomar forma». Sefcovic enfatizó que su enfoque está centrado en que «la UE y EE. UU. comparten un vínculo comercial y de inversión único; enfrentamos muchos de los mismos desafíos, por lo que lo más lógico sería hallar soluciones conjuntas» para lograr un acuerdo «justo, equilibrado y duradero».
En cuanto a las medidas arancelarias adoptadas por Trump, se incluyen tarifas del 25% sobre el acero, el aluminio y productos relacionados, así como sobre automóviles y piezas importadas. Para todos los socios comerciales de EE. UU., se encuentra en vigor un arancel base del 10%. En el caso de la UE, este arancel podría ascender al 20% una vez que concluya la actual moratoria estadounidense el 9 de julio.
La Comisión Europea, por su parte, había implementado contramedidas en respuesta a los aranceles estadounidenses, aunque las suspendió hasta el 14 de julio para facilitar un margen de negociación. En este momento, se están evaluando nuevas contramedidas, valoradas en aproximadamente 100.000 millones de euros, que podrían afectar productos agrícolas e industriales de EE. UU., abarcando desde aviones hasta bourbon, si las negociaciones no prosperan. Sefcovic indicó que «hemos dejado claro que las contramedidas no son nuestra primera opción» y se refirió a «una lista de medidas de reequilibrio».
El subsecretario de Estado polaco para Comercio, Michal Baranowski, manifestó un optimismo cauteloso respecto al proceso: «A veces digo que hacen falta dos para bailar un tango, y creo que ahora tenemos a los dos, y quizás debamos movernos un poco más rápido por ambas partes». Asimismo, los ministros debatieron sobre cómo acelerar los procedimientos internos para ratificar tratados, como el del Mercosur, que a menudo tardan años.
Baranowski también expresó su esperanza de que para junio comiencen las negociaciones con el Parlamento Europeo sobre el reglamento vinculado a la selección de inversiones extranjeras directas y otros controles económicos. Estas discusiones podrían influir considerablemente en la gobernanza de la seguridad económica de la UE.