La startup española Abacum quiere acabar con la dependencia del Excel de los equipos financieros. Y acaba de cerrar una ronda de inversión de 52,5 millones de euros para hacerlo.
La operación, liderada por Scale Venture Partners y respaldada por fondos como Cathay Innovation, Y Combinator, Creandum, Kfund y Atomico, supone la Serie B de la compañía nacida en 2020.
El objetivo: consolidar su plataforma de business planning como la herramienta clave para los nuevos equipos de finanzas.
«Los equipos financieros están pidiendo plataformas impulsadas por IA que les permitan ser verdaderos motores estratégicos en sus empresas», señaló Julio Martínez, CEO y cofundador de Abacum.
Jorge Lluch, cofundador del proyecto, comparte con él la ambición de convertir el departamento financiero en un centro de decisiones, no solo de control.
Con oficinas en Barcelona, Nueva York y Londres, Abacum ha visto cómo más del 50% de sus ingresos proceden ya del mercado estadounidense. Esta ronda permitirá seguir escalando en EE.UU. y acelerar el desarrollo de su propuesta basada en IA multiagente, automatización y colaboración.
Entre las prioridades de inversión destacan:
- Una IA multiagente que propone acciones, anticipa necesidades y ayuda a navegar escenarios complejos.
- Un motor de modelización más ágil y flexible para planificar en contextos inciertos.
- Un sistema de datos robusto que centraliza la información financiera y conecta con el stack tecnológico existente.
- Flujos de trabajo colaborativos que posicionan a Finanzas en el centro del negocio.
Clientes como Strava, Aiven, JG Wentworth o Mastercam ya utilizan Abacum. Y los resultados acompañan: «Reducimos en un 73% el ciclo de informes y en un tercio las necesidades de personal», explica Richard Harem, director financiero de RapidSOS.
En la misma línea, Nico Serventi, director financiero de Kajabi, asegura haber ganado una semana al mes y transformado su enfoque hacia la estrategia.
En los últimos 12 meses, Abacum ha triplicado sus ingresos, ampliado su presencia a 31 países y mantenido el mismo equipo. El crecimiento, apuntan, es ejemplo de su propia promesa: escalar sin despilfarrar.