El banco neerlandés ABN Amro registró un beneficio neto de 606 millones de euros en el segundo trimestre de 2025, un 6% menos que en el mismo periodo del año anterior, cuando obtuvo 642 millones.
«El segundo trimestre de 2025 fue un trimestre sólido para ABN Amro. Obtuvimos un beneficio neto de 606 millones de euros y una rentabilidad sobre recursos propios del 9,4%. En comparación con el trimestre anterior, observamos un ligero descenso en los ingresos netos por intereses y en los ingresos por comisiones, que se vio compensado por el aumento de otros ingresos», destacó Marguerite Bérard, directora general de ABN Amro.
La cartera hipotecaria aumentó en 1.800 millones de euros y los activos de los clientes crecieron en 8.600 millones.
El ratio CET1 del banco, que indica la solidez de su colchón, aumentó al 14,8%.Por otro lado, los ingresos cayeron levemente en el segundo trimestre frente al mismo periodo del año anterior, hasta 2.143 millones de euros, frente a los 2.171 millones registrados en esos tres meses de 2024.
Bérard señaló que la economía neerlandesa se ha mantenido resiliente en la primera mitad del año pese a los desarrollos geopolíticos y a la caída del Gobierno, con bases sólidas en el aumento del empleo, un crecimiento salarial por encima de la inflación y una política fiscal prudente.