Argentina colocó deuda en el mercado doméstico por un total de 9,14 billones de pesos, equivalentes a 6.652 millones de dólares, mediante letras y bonos del Tesoro en moneda local.
Según informó la Secretaría de Finanzas, se recibieron ofertas por un total de 9,97 billones de pesos, aunque varias series fueron declaradas desiertas.
En esta licitación se ofrecieron ocho series de letras del Tesoro con vencimientos entre septiembre de 2025 y febrero de 2026, y tres series de bonos a vencer entre octubre de este año y febrero de 2026. Sin embargo, el Tesoro solo logró refinanciar el 61% de los vencimientos previstos para esta semana.
El desafío era doble: absorber liquidez monetaria y mantener el atractivo de los títulos en un contexto de tensión financiera. Para lograrlo, el Gobierno convalidó tasas de hasta el 69,2% anual, superiores a las registradas en colocaciones anteriores.
La próxima subasta de deuda interna del Tesoro argentino está prevista para el 27 de agosto, y volverá a poner a prueba la capacidad del Ejecutivo para seguir financiándose en el mercado local.
