Inditex, propietario de Zara, presentará este miércoles los resultados de su primer semestre fiscal (febrero-julio 2025), que según los analistas marcarán un récord en beneficio y facturación, aunque con un crecimiento más contenido respecto a ejercicios anteriores.
El consenso de Bloomberg estima un beneficio neto de 2.822 millones de euros, un 1,9% más que en el mismo periodo de 2024, cuando el avance superó el 10%. La facturación ascendería a 18.500 millones, un 2,5% más, frente al 7,2% registrado un año antes.
En el segundo trimestre aislado (mayo-julio), el mercado espera ventas de 10.255 millones, con un incremento del 3,4%, y un beneficio de 1.528 millones, tras crecer un 3,6%. Ambas cifras confirman la ralentización frente al mismo trimestre de 2024, cuando los avances superaron el 7% en ingresos y el 9% en beneficios.
Entre los factores que explican la moderación se encuentran la ralentización del consumo, el impacto de los aranceles estadounidenses sobre productos europeos y la evolución de la divisa. La recuperación de ventas en el segundo trimestre se apoyó en una meteorología más favorable al cambio de temporada.
El contexto también muestra que las comparativas son exigentes: en los primeros semestres de 2024, 2023 y 2022 el beneficio neto creció un 10,1%, 40,1% y 41%, respectivamente.
En bolsa, Inditex acumula una caída superior al 14% en 2025, con la acción en torno a los 40 euros, lejos de los 56,34 euros alcanzados en diciembre de 2024. La compañía aprobó en la última Junta un dividendo de 1,68 euros por acción, repartido en dos pagos. El segundo, de 0,55 euros más 0,29 euros complementarios, se abonará el 3 de noviembre.