Carlos Blanco, CEO de Encomenda, desmonta mitos sobre inversión, liderazgo y emprendimiento, y lanza sugerencias sobre la inteligencia artificial, la resiliencia de los fundadores y el futuro de los ecosistemas innovadores en España, con mensajes directos y claros para quienes hoy piensan emprender.
The Officer.- ¿Por qué invierte un inversor?
Carlos Blanco.- El inversor siempre invierte para ganar dinero, que quede claro. Es decir, que quede claro qué es el objetivo número uno. A veces la gente se despista en los objetivos secundarios, como puede ser el impacto, apoyar a otros.
Pero evidentemente, tanto un inversor Business Angel como un inversor de un fondo de Venture Capital, todos invertimos por ganar dinero.
TOFF.- ¿Qué te hace apostar por una startup cuando otros dudan?
CB.- Líder, mercado, equipo. Y es lo que miramos en etapas seed.
Luego, evidentemente, cuando vamos invirtiendo en etapas más avanzadas, ahí sí que miramos métricas, sí que miramos crecimiento, sí que miramos competencias, sí que miramos muchas otras cosas.
TOFF.- ¿Cómo tiene que ser el líder de una startup para que comienza?
CB.- 14-15 características que podríamos dedicar mucho tiempo imposible de que cumpliera todo. Que tienen que estar todas a la vez y que muy posiblemente, si el emprendedor falla solo en una de ellas, el proyecto ya no va a tener éxito.
Evidentemente, hay muchas que todo el mundo ya sabe. No hace falta repetir el concepto inteligente, no hace falta repetir el concepto pasión, no hace falta repetir el concepto trabajador. Esos tres como mínimo, pero yo diría mucho más.
Tiene que ser un buen comunicador, tiene que tener un conocimiento transversal medio-alto de varias áreas. Difícilmente un buen líder será un especialista solo en una cosa. Tiene que tener un nivel 7-8 en muchas cosas. Tiene que ser una persona generosa, confiable, ambiciosa, muy ambiciosa, valiente, resiliente, importante tenernos ahí.

TOFF.- ¿Es tan importante ser resiliente?
CB.- Muchos emprendedores a los que viene la primera hostia les cuesta levantarse. Y entonces no todo el mundo está preparado para ser emprendedor.
Y el ser resiliente significa que tienes una hostia y te levantas, tienes otra hostia y te levantas, tienes otra hostia y te levantas. Y el 80-90% de la gente después de dos o tres hostias lo que hace es abandonar. Entonces cuando alguien te dice que no tres veces, ¿tú sigues intentándolo o no? Pues el emprendedor es el que lo sigue intentando.
Entonces, el emprendedor es alguien insistente, con capacidad de resiliencia, valiente, con mucha confianza en sí mismo..
TOFF.- ¿Quién crees que pierde más cuando hay error en una idea de negocio? ¿El que invierte o el que la pone en marcha?
CB.- Se arriesga más el emprendedor. Porque el emprendedor hace una única apuesta.
Y los inversores diversificamos en apuestas. Yo cuando fui Business Angel, antes de ser gestor de fondos de Venture Capital, invertí en más de 100 startups. Mi apuesta fue diversificada.
Cada uno de esos emprendedores hizo una apuesta all-in por una única compañía. Evidentemente el que más pierde es el emprendedor porque no solo pierde el dinero, pierde tiempo, pierde energía. A veces tiene daños colaterales, psicológicos, de amistades, de pareja, de muchas cosas.
Entonces, si va mal, tiene más que perder el emprendedor que el inversor. Porque el inversor, su deber es diversificar. Es cierto que algunos inversores la cagan, se equivocan y diversifican muy poco.
«El emprendedor es el que lo sigue intentando»
TOFF.- ¿Qué sería lo ideal?
CB.- Yo he visto a veces algún Family Office que ha metido dos millones y medio en un único proyecto y dice que invertía en startups poco. Su error fue invertir dos millones y medio en un único proyecto, que quebró. Ese señor nunca más lo ha vuelto a hacer. Ese señor sí que perdió mucho porque cometió un error. Los inversores tenemos que invertir de forma muy diversificada.
Tanto los Business Angels como los fondos de Venture Capital. Y diversificar en mercados, en modelos de negocio, en tipos de sectores y siempre teniendo en cuenta las tendencias que hay en cada momento que son cambiantes.

TOFF.- Creo que tú has sido también emprendedor.
CB.- De hecho, me considero más emprendedor que inversor. Aquí estás ahora mismo las oficinas mías de Núcleo, que es la parte de emprendimiento, y con esto la aceleradora. En la planta 2 de este mismo edificio está la parte de fondos de inversión, de Encomenda.
Entonces, al final, yo soy el que empieza como emprendedor, que las cosas le van bien, que gana algo de dinero, que si algo de dinero empieza a reinvertirlo como Business Angel, y que luego gana mucho dinero como emprendedor, y ahí me paso ya a crear un Venture Builder primero y crear un Venture Capital después.
Pero yo me sigo considerando emprendedor, pero evidentemente los números dicen que soy muy buen inversor, y ser inversor prolonga la carrera profesional mucho más que ser emprendedor. Ser CEO, emprendedor, fundador, con 60-65 años, no lo veo.
En cambio sí que puede ser inversor, consejero, board member, en una startup con 70 años. Entonces, claro, evidentemente es una lógica evolución de muchos emprendedores de éxito, que a partir de los 50 y pico nos vayamos pasando al lado inversor, porque al final no solo aportamos dinero, sino aportamos dinero, conocimiento, experiencia, contactos, muchas cosas más.

TOFF.- ¿Hace falta ser emprendedor para ser un Business Angel o montar un Venture Capital? Cuando tú inviertes en una startup, ¿tienes que vivirla con la misma pasión?
CB.- Yo creo que esta pregunta se la tendrías que hacer principalmente a los emprendedores. Que te diga el emprendedor, oye, ¿qué diferencia has notado de si tú has tenido en tu board inversores que han sido emprendedores exitosos previamente, o has tenido inversores financieros?
Yo creo que los más apropiados para definir son los propios emprendedores. Y los que yo conozco más del 90% te van a decir que prefieren inversores emprendedores.
Primero, porque no solo les aportan dinero, les aportan mucho más. Y segundo, porque les entienden mucho más en un momento de crisis. El que algo no ha vivido nunca, no puede tener el mismo nivel de empatía, paciencia y conocimiento para gestionar un problema que el que nunca lo ha vivido.
Eso sí es sencillo por un tema de experiencias. Entonces aquí, en general, en la mayoría de mercados, hay más Venture Capital con perfil financiero que emprendedor. En España hay unos pocos fondos fundados por gente emprendedora.
Hay algunos muy pocos, y en los pocos que lo hay, pues a lo mejor hay una persona emprendedora en el equipo. No hay más de una emprendedora de éxito. A mí me gustan fondos como ForFounders, que está fundado por tres emprendedores de éxito.
«No creo que haya una burbuja de inversión. Al revés, hay un frenazo»
TOFF.- Parece que hay una burbuja ahora en el tema de la inversión en Private Equity. ¿Es real?
CB.- No creo que haya una burbuja. No, al revés, hay un frenazo.
Es decir, si miramos los números, han frenado un poco. Ahora vuelve a activarse, pero tampoco estamos con el concepto burbuja. Significa que algo empieza a elevarse exponencialmente.
No hay ninguna elevación. Si tú te miras las inversiones del 2014 para aquí, son lineales en crecimiento. Solo que hay una subida fuerte en el 2021 por la pandemia y una caída en el 2022-2023.

Y luego a partir del 2024 vuelve a subir a la misma línea que llegaba antes. Si dibujamos la línea, realmente la línea de la inversión en los últimos 15 años ha ido creciendo lentamente. Solo que en el 2021 creció mucho y luego en el 2022-2023 cayó. Pero ahora volvemos a estar en el 2024-2025 en la continuación del crecimiento.
TOFF.- ¿No has detectado un auge en la creación de Venture Builders dentro de cotizadas?
CB.- Que una corporación intente emprender es un error como una catedral. El problema de las corporaciones es que las personas que saben de tecnología, internet e innovación son asalariados. Una corporación nunca va a poder construir una startup.
Muchas corporaciones han intentado montar Venture Builders. Entonces sí tiene sentido que monten un Corporate Venture Capital. Eso sí tiene sentido.
Eso lo han hecho una decena de corporaciones en España. La diferencia es que, en España, los Corporate Venture Capital lo hacen al estilo yo me lo guiso, yo me lo como, con gente de su equipo.
Mientras que en Europa, cuando en Alemania o Francia o Reino Unido un Corporate crea un Venture Capital, lo que hace es aliarse con un Venture Capital y lo crea con él. Aquí en España tenemos tendencia a nos lo creamos nosotros con empleados de la compañía. Error.
La rentabilidad va a ser difícil y eso evidentemente no le augura mucho futuro en el modelo. Hay muy pocos casos. Destacaría apenas el caso de Palladium.
«Una corporación nunca va a poder construir una startup»
TOFF.- Vosotros, ¿estáis apostando por la inteligencia artificial, por startups basadas en inteligencia artificial?
CB.- Todo el mercado está apostando por la inteligencia artificial.
Te puedo poner desde mis dos vertientes, mi vertiente inversora con Encomenda, pues a día de hoy más del 50% de las startups de las que estamos invirtiendo son startups de inteligencia artificial.
Pero en mi caso estoy apostando por inteligencia artificial aplicada a un sector vertical. Es decir, no creo que tenga sentido que en España invirtamos en startups de inteligencia artificial generalista, aunque se está intentando en Francia y, por supuesto, en Estados Unidos y en China.

TOFF.- ¿Por qué esta apuesta personal?
CB.- Pienso que va a ser difícil que se pueda crear desde España algo tan potente como Perplexity, como ChatGPT, como DeepSeek, lo veo inviable. Hablaban ahí de un ChatGPT europeo. Lo veo inviable.
Los chinos van muy por delante de Europa. Los chinos antes copiaban, ahora innovan. Los americanos van super por delante de Europa.
Pero lo que sí tiene sentido es que nazcan startups verticales.
Startups de educación, health care, de logística que usan la IA. Eso sí que tienes de cualquier sector y eso es lo que apuesta de Encomenda. En especial en startups que tengan data propia.
Porque no olvidemos que la IA es como si habláramos de un antiguo PC hace 30 años sin software. O habláramos de una televisión cuando solo tenía la 1 y la 2. La inteligencia artificial sin data privada no tiene tanto valor añadido.
La clave del momento histórico es por la confluencia de cuatro tecnologías que se llevan 15-20 años preparando: la inteligencia artificial, que es la evolución del machine learning, el big data, el blockchain que es una evolución de todo el mundo de la criptografía y, evidentemente, el quantum computing todo lo que es la supercomputación.
Tenemos cuatro tecnologías que llevan 15-20 años creándose que por puñetera casualidad confluyen en su momento álgido las cuatro a la vez. Por eso creo que en los cinco próximos años va a haber un boom de startups superinteresantes en todos los países del mundo.
Lo veo como un momento muy muy bueno para invertir en startups tecnológicos. Creo que es un momento muy bueno para emprender y para invertir en startups y, evidentemente, la inteligencia artificial tiene que ser el peso de tu cartera siempre y cuando lo hagas en startups como yo estoy explicando.
TOFF.- Hace cinco años pronosticaste que dentro de cinco años sería el auge de las ProTech. ¿Tú crees que se ha cumplido ese pronóstico?
CB.- Bueno, lo que ha pasado en el mundo ProTech es que cuando yo pronostiqué esto fue antes del COVID y el COVID fue algo que pegó una hostia brutal al mundo del real estate offline y online y en ese momento murieron un montón de startups ProTech.
Lo que ha pasado en el mundo ProTech es que antes, hace cinco años, yo pensaba que acabarían saliendo startups líderes en diferentes mercados y la realidad es que ahora no es así el mercado y que el líder del mercado absoluto que es Housfy, startup que yo fundé hace casi diez años, ha encontrado el negocio haciendo todas las cosas, administración de fincas, compra-venta de pisos, alquileres y hipotecas.

Al final lo que no ha tenido sentido ha sido crear compañías individuales para cada cosa, ha tenido sentido crear compañías 360 que den todo tipo de servicio alrededor de la vivienda.
TOFF.- El auge emprendedor está generando una España a dos velocidades. Tenemos las grandes ciudades, pero hay toda una capa de ciudades intermedias que pueden tener mucho potencial y realmente no están siendo capaces de ser tractoras de este tipo de iniciativas. ¿Qué es lo que crees que tiene que tener el territorio para que haya un movimiento?
CB.- Empiezo diciendo que lo veo muy difícil porque hay muchos estudios de los análisis de los ecosistemas exitosos y todos esos estudios dicen que esa zona tiene que tener una gran escuela de negocios. Tener una o dos escuelas de negocios muy buenas, los principales hubs del mundo tienen escuelas de negocios muy buenas, y ¿dónde hay en España? Barcelona y Madrid.
Segundo, tiene que haber fondos de Venture Capital y el 90% en Barcelona y Madrid, tiene que haber inversores.
Tiene que haber grandes universidades y España no tiene grandes universidades, aunque tenemos buenas, buenas universidades en Barcelona y en Madrid. Si miras el ranking de 100 universidades europeas, no te aparece ninguna española antes de la 80 o 90.
La pregunta es, ¿tiene sentido luchar por intentar que entre en este ranking Valladolid o Córdoba, o incluso Valencia o Zaragoza? Pues, sinceramente, lo veo difícil. Veo difícil que, de golpe, vaya a haber buenas escuelas de negocio allí, que se vayan a implantar buenas agencias de marketing, no me lo creo.
Hay que crear ecosistema. Que antes haya habido emprendedores de éxito. Y eso ha pasado en Barcelona, primero, y luego en Madrid.
TOFF.- Si tuvieras que volver a emprender por primera vez después de todo de todo lo que has visto, de todo lo que sabes, ¿qué empresa crearías en 2025?
CB.- Con mi edad actual es diferente. Evidentemente crearía una startup basada en IA y posiblemente apostaría por el mercado del healhtech. Yo creo que en ese sector quedan muchas más cosas por hacer. Sí, crearía una startup de healhtech usando IA y data.
TOFF.- ¿Qué consejo darías al que está preparando ahora su primera ronda de inversión?
CB.- Que se mire al espejo para saber si él está preparado para ser un emprendedor.
El 70-80% de los emprendedores que me encuentran quieren saltarse etapas y quieren que el inversor les financie el aprendizaje. Y el emprendedor ha de entender que primero tiene que aprender y segundo emprender.
Procura trabajar al lado de gente buena. Hazlo muy bien para que ese jefe te dé responsabilidades. Y cuando te dé responsabilidades tu jefe, empezarás a contratar, empezarás a despedir, empezarás a a gestionar una cuenta de resultados, la acompañarás un día a vender, a comprar, a negociar.
Todo eso lo puedes aprender siendo emprendedor, pero ¿qué es lo que ocurre en esos casos? Que no suele funcionar y que al final muchos business angels pagamos erróneamente la formación del novato.
Por eso en Encomenda estamos invirtiendo casi tres cuartas partes en emprendedores de más de 40 años y en emprendedores que es su segunda o tercera startup que fundan. Es mucho más rentable invertir en gente por encima de 35.
TOFF.- ¿En el 19 dijiste que las startups en una entrevista podían convertirse en el tercer motor de la economía y me ha atado a preguntarte, ¿lo son?
CB.- Ya no tengo datos. Yo creo que en Estados Unidos sí que era el tercer canal en generación de empleo. Ahí venimos de un frenazo. Pues hoy en día no me atrevería a decírtelo. Porque la inteligencia artificial va a cambiar todo.
La gente no es consciente de lo que viene. Eso va a redefinir más del 90% de los empleos. Nos vamos a encontrar en una sociedad en la que no va a haber trabajo para todos. Encima por la longevidad, que es el siguiente gran boom que viene.
Yo creo que que posiblemente veremos cambios sociales, incluso en alguna etapa, si no se gestiona bien, problemas sociales.