Agosto: ese mes que se arrastra entre el último tramo de las vacaciones y los resquicios del primer semestre del año. En este periodo, es fácil caer en la tentación de desconectarse un poco más de lo habitual. El sol, las altas temperaturas y las vacaciones de verano invitan a relajarse.
Sin embargo, para los CEOs y líderes de empresas, mantener el enfoque y la motivación durante esta temporada puede marcar la diferencia entre un cierre de año exitoso o un aterrizaje brusco al final del semestre. ¿Cómo pueden los líderes mantener la energía, tanto para sí mismos como para sus equipos, en medio del calor y la desconexión?
Tabla de contenidos
Claves para reconectar y descansar
1. Establece metas realistas de verano
Las metas grandes de principio de año pueden parecer lejanas en agosto. Pero eso no significa que los líderes deban abandonar por completo la visión a largo plazo. La clave está en dividir los objetivos del semestre en metas de verano más pequeñas y alcanzables.
El verano es ideal para trabajar en tareas menos urgentes pero igualmente esenciales: repensar procesos, evaluar nuevos mercados o simplemente revisar los resultados de los primeros meses del año. Las metas de verano no deben ser desmesuradas; pueden ser tan simples como cerrar un pequeño proyecto pendiente o realizar una revisión estratégica del equipo.
Brian Chesky, CEO de Airbnb, es un claro ejemplo de cómo dividir el trabajo en ciclos más pequeños. Durante el verano, Airbnb se enfoca en la autonomía del equipo, alentando a los empleados a tomar decisiones sin necesidad de esperar aprobaciones constantes, pero con el enfoque claro de mejorar la experiencia del cliente.
2. La cultura del descanso inteligente: si descansas, descansas bien
El concepto de trabajar sin parar está siendo cada vez más cuestionado. A medida que las empresas adoptan horarios más flexibles y el trabajo remoto se establece como una norma, la idea de trabajo eficiente ha pasado a ser más importante que el trabajo constante. Es fundamental para los los directivos no solo predicar la importancia de los descansos, sino también practicarlos.
Implementar «breaks inteligentes» puede ser la clave para mantener la productividad alta sin quemar a los empleados. Desde pequeños descansos cada hora hasta pausas largas para almuerzos o actividades al aire libre, promover estos momentos de desconexión recarga la energía de todos y fomenta una mayor creatividad.
«El descanso potencia la salud mental y la productividad». Es la filosofía de Richard Branson, fundador de Virgin, conocido por promover el descanso en sus equipos. En sus oficinas, a menudo se ven áreas recreativas, y se fomenta que los empleados tomen tiempo para salir a caminar o disfrutar de actividades que les permitan desconectar de la rutina diaria.
3. Liderazgo flexible: adapta tu estilo a las circunstancias
Las vacaciones de verano ofrecen una oportunidad perfecta para ajustar el estilo de liderazgo. La flexibilidad es fundamental. Durante el verano, un enfoque menos riguroso puede ser necesario, y los líderes deben estar dispuestos a adaptarse a un ritmo diferente, sin perder de vista los objetivos.
Fomentar la autonomía en los equipos, confiar en sus capacidades para trabajar de manera más independiente y establecer plazos claros pero razonables puede dar como resultado un clima de confianza que favorezca tanto la productividad como el bienestar.
Sundar Pichai, CEO de Google, ha demostrado a lo largo de los años que la flexibilidad no está reñida con el rendimiento. Durante los meses de verano, Google permite horarios de trabajo más flexibles y enfocados en la gestión del tiempo personal. Pichai entiende que, al dar a su equipo la libertad de organizar su tiempo, se crea un espacio donde la innovación puede prosperar sin la presión constante del reloj.
4. Reinvéntate a ti mismo y a tu empresa: aprovecha la energía para innovar
El verano, con su ambiente relajado y la oportunidad de tomar un respiro, es el momento perfecto para pensar en la innovación. Las ideas frescas surgen cuando el ritmo se desacelera y los líderes tienen la libertad de reflexionar más profundamente.
Implementar cambios pequeños, como ajustar los procesos o probar nuevas herramientas tecnológicas, puede ser la mejor manera de mantener a la empresa dinámica y preparada para afrontar la recta final del año.
Stuart Butterfield, CEO de Slack, es conocido por su enfoque relajado hacia la cultura laboral, pero eso no significa que descuide la innovación. Durante el verano, Slack realiza hackathons internos donde se invita a los equipos a experimentar con nuevas ideas, sin la presión de lanzar algo al público de inmediato.
Este tipo de ensayos no solo mantiene la creatividad fluyendo, sino que refuerza la cohesión del equipo.
5. La importancia de la desconexión de la gran imagen
A veces, el mejor enfoque para la motivación en verano no es el trabajo intenso, sino la desconexión de la «gran imagen». Los líderes pueden tomar este tiempo para reflexionar, analizar la dirección de la empresa y considerar nuevas oportunidades.
Alejarse un poco de la sobrecarga de detalles y centrarse en la visión general permite tener una perspectiva más clara de lo que se está construyendo y hacia dónde se quiere ir.
Jeff Bezos, fundador de Amazon, es un firme defensor de tomarse el tiempo necesario para «salir de la tormenta».
Durante el verano, Bezos se toma días sin compromisos, donde se dedica a pensar estratégicamente, reflexionar sobre el futuro y reconectar con lo que verdaderamente importa a largo plazo. Este tipo de desconexión consciente permite que los líderes regresen al trabajo con una energía renovada y una visión más clara.
El secreto está en el equilibrio
El verano es un momento único para resetear, tanto para los líderes como para sus equipos. Las claves para mantener el enfoque y la motivación en esta temporada son simples: establecer metas alcanzables, promover descansos inteligentes, ser flexible en el liderazgo, aprovechar el tiempo para innovar y también desconectar para reflexionar.
Al final, el éxito de los próximos meses dependerá no solo de la capacidad de seguir trabajando duro, sino de trabajar con más inteligencia, sabiendo cuándo es momento de acelerar y cuándo es el momento perfecto para recargar energías.
Al fin y al cabo, el verano también es una oportunidad para que tanto CEOs como equipos vuelvan al trabajo con una energía renovada, listos para afrontar el segundo semestre con una actitud fresca, ágil y enfocada.