Las agencias hipotecarias estadounidenses Fannie Mae y Freddie Mac han confirmado que aceptarán criptoactivos como parte del proceso de concesión de hipotecas, lo que supone un nuevo paso hacia la integración de la economía digital en el sector financiero tradicional.
La medida permite que los compradores puedan utilizar sus carteras digitales de criptomonedas como respaldo financiero, sin necesidad de convertir previamente esos activos a dólares. Con esta decisión, Estados Unidos se convierte en uno de los primeros mercados en formalizar el uso de criptomonedas en el acceso a la vivienda.
El cambio implica que las entidades analizarán la valoración, origen y estabilidad de los activos digitales, elementos clave para evaluar la solvencia del comprador. Sin embargo, el uso de criptomonedas plantea riesgos asociados a su alta volatilidad, lo que puede afectar a la seguridad del préstamo si no se gestionan adecuadamente.
Pese a las incertidumbres, esta decisión marca un hito en la convergencia entre el sistema financiero tradicional y el ecosistema cripto. La adopción por parte de dos de las principales agencias del sector puede acelerar la entrada de otras entidades y favorecer el desarrollo de nuevos modelos de financiación basados en tecnología blockchain.
