Crusoe Energy está liderando un proyecto innovador que busca fusionar la energía sostenible y el cómputo avanzado. Inicialmente, la empresa se centró en utilizar el gas de venteo, a menudo desperdiciado, para alimentar operaciones de minería de bitcoin. Este enfoque no solo aprovecha un recurso disponible sino que también reduce las emisiones de gases de efecto invernadero.
Su proyecto más notable es el centro de datos Stargate, situado en un terreno de 400 hectáreas en Abilene, Texas. Descrito como un «paso adelante» para la empresa, Stargate representa un núcleo tecnológico enfocado en la eficiencia y sostenibilidad.
Este centro de datos se está desarrollando para grandes actores tecnológicos como OpenAI y Oracle, con la participación de Microsoft. La meta es crear uno de los centros de datos dedicados a la inteligencia artificial más grandes del mundo.
La visión es que las IA entrenadas en Stargate puedan superar la cognición humana. Chase Lochmiller, CEO de Crusoe, lo ha llamado «fábrica de fábricas», donde la IA generará más sistemas similares en un ciclo continuo.
Para finales de este año, Crusoe planea instalar 100.000 unidades de procesamiento gráfico (GPUs) Nvidia en cada uno de los dos primeros edificios. Cada edificio de datos consumirá 100 megavatios de electricidad, comparable al consumo de una ciudad pequeña.
La mayor parte de esta energía provendrá de cientos de turbinas eólicas en el oeste de Texas. Además, se han instalado turbinas a gas de General Electric Vernova como respaldo para garantizar la continuidad operativa.
La construcción de los dos primeros edificios de Stargate ha requerido 3.400 millones de dólares, obtenidos mediante una empresa conjunta. El coste estimado para la fase completa del Proyecto Stargate, que tendrá 10 edificios y 1.2 gigavatios de capacidad, se sitúa en 15.000 millones de dólares.
Gigantes como Oracle, Softbank y OpenAI han comprometido una inversión masiva de 500.000 millones de dólares en el futuro de la IA y la ventaja global de Estados Unidos. Sam Altman de OpenAI los ha calificado como «edificios grandes y hermosos».
Crusoe fue seleccionada para este proyecto, a pesar de ser una empresa relativamente desconocida. Sus fundadores, Chase Lochmiller y Cully Cavness, fueron elegidos por su ambición para construir centros de datos a gran escala y su convicción en asegurar el suministro energético necesario.
Aunque la fiabilidad de los servicios en la nube de Crusoe ha sido cuestionada por algunos, la empresa asegura una disponibilidad del 99,98%. Algunos clientes satisfechos resaltan la rapidez con la que Crusoe les proporciona acceso al hardware, vital en la carrera por desarrollar modelos de IA.
Crusoe ha recaudado un total de 1.820 millones de dólares en capital, alcanzando una valoración de 2.800 millones. Los edificios de Stargate contendrán cuatro salas de datos, cada una con 25 megavatios de potencia informática.
