El consejero delegado de Iberdrola España, Mario Ruiz-Tagle, cree que «claramente» se está señalando a las eléctricas «desde el minuto 1» en el que se produjo el apagón del pasado 28 de abril, y ha dicho que sí hubo un problema de generación, pero que fue el efecto y no la causa del incidente.
En el foro CREO, Ruiz-Tagle ha revelado que disponen de datos según los cuales días antes del episodio -16, 22, 24 y el propio 28 de abril- se dieron fuertes oscilaciones de la red, por lo que Red Eléctrica tuvo que haber registrado una cantidad de alarmas «enorme» por sobretensiones.
Existen múltiples causas para estas sobretensiones, ha afirmado el consejero delegado, que ha incidido en que la responsabilidad de amortiguar esos fenómenos no es «ni de la distribución, ni de la generación», sino del operador único y exclusivo de la red, en alusión a Red Eléctrica.
En cualquier caso, hay que separar «responsabilidad y culpabilidad», ha indicado Ruiz-Tagle, que ha reprochado a la presidenta de Redeia, Beatriz Corredor, que dijera en una entrevista que las tecnologías convencionales no fueron capaces de soportar la inercia, unas declaraciones que -ha admitido- le han sorprendido.
También ha advertido de que el día del apagón «faltó inercia» en el sistema eléctrico porque disponen de una llamada registrada cinco minutos antes del evento en el que les piden «un ciclo combinado».
«Esto no será por bonito», ha ironizado el consejero delegado de Iberdrola España.
El relato oficial que compartió la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, en el Senado es que el nivel de inercia del sistema eléctrico peninsular era acorde con las recomendaciones de la red de operadores europeos Entso-e cuando se produjo el cero eléctrico.
Una reputación «a cuidar»
Durante su intervención, que ha transcurrido en un visible tono crítico, Ruiz-Tagle ha hablado de los datos de los que dispone Iberdrola, que vio cómo sus instalaciones, en el apagón, se desconectaron por sobretensiones.
En la primera zona en la que se detecta una pérdida de generación previa al incidente, la región suroeste, la compañía dispone de una «gran instalación» conectada a una subestación de 400.000 voltios (v). En ella tienen registros «por el lado de Red Eléctrica en la red visible por el agente de generación» de casi 475.000.
«¿Antes del apagón funcionaba todo? Sí, pero se cae porque hay una sobretensión brutal en el sistema», ha recalcado.
Según el consejero delegado de Iberdrola España, él «no quería entrar al trapo» ni en «especulaciones ni titulares», porque hay que ser «capaces de salir de este evento con datos, buscando dónde está el problema».
«Pero tengo una empresa con 125 años de historia que ha estado en todos los fenómenos de este país y tenemos una reputación que dijimos desde el día 1 que íbamos a cuidar», ha sentenciado.