La startup holandesa Duna ha hecho pública una ronda de financiación de 10,7 millones de euros destinada a intensificar el desarrollo de su plataforma y ampliar su red. Constituida en 2023 por David Schreiber y Duco van Lanschot, la marca pretende actualizar su identidad empresarial al combinar obligaciones regulatorias con un enfoque centrado en la usabilidad.
La operación inversora estuvo encabezada por Index Ventures, con la participación de Frank Slootman, antiguo consejero delegado de Snowflake, y Mariette Swart, CRCO de Adyen. También participaron David Singleton, ex director tecnológico en Stripe, y Claire Hughes Johnson, jefa de operaciones en Stripe.
Duna trabaja con clientes como Plaid, Bol, Moss, Sequra y Brand New Day Bank. La empresa ha informado que gracias a su plataforma los clientes han visto aumentar su conversión en un 38% en seis meses. «La integración de negocios antes implicaba un gasto operativo para Plaid. En la actualidad, representa un generador de ingresos gracias a los flujos de registro intuitivos proporcionados por Duna», ha comentado Zak Lambert, vicepresidente para EMEA de Plaid.
El objetivo de Duna a largo plazo consiste en establecer una red global de identidad empresarial compartida, semejante a un «pasaporte digital». «La identidad continúa siendo uno de los grandes desafíos sin resolver en internet», ha explicad Duco van Lanschot, cofundador de Duna remarcando que «creamos Duna para solventar ese aspecto».
Un tercio de la firma está en manos de la Fundación Duna, una institución sin ánimo de lucro conectada con sus principios. «Tener una entidad sin ánimo de lucro como uno de nuestros accionistas principales significa que desarrollar algo relevante se traduce en beneficio para todos: clientes, plantilla y sociedad», han señalado Schreiber y van Lanschot.