El Banco Europeo de Inversiones (BEI) ha elevado a 3.000 millones de euros la dotación de su programa de financiación para pymes del sector de seguridad y defensa, el triple de lo presupuestado inicialmente el año pasado, según anunció la presidenta de la entidad, Nadia Calviño.
En una conversación pública con el presidente de la Agencia EFE, Miguel Ángel Oliver en Bruselas, Calviño anunció además que el grupo ha firmado hoy un primer acuerdo con el banco alemán Deutsche Bank para financiar con 500 millones de euros una línea de crédito y liquidez para pymes, y espera suscribir en los «próximos días» un segundo acuerdo con el Banco Popular de Francia en el marco de esa iniciativa.
«Por tanto, dos grandes bancos europeos están beneficiándose de la financiación del BEI para poder apoyar toda la cadena de valor», dijo Calviño respecto a este programa, destinado a apoyar a las pymes que participan de la cadena de los grandes contratistas de seguridad y defensa europeos.
La presidenta del BEI defendió la necesidad de reforzar la financiación y la capacidad europea en materia de seguridad y defensa y recordó que el grupo ya amplió en 2024 su ámbito de actuación en este ámbito y ha vuelto a hacerlo este año.
Calviño explicó que el BEI está estudiando una cartera de «más de 20 proyectos significativos en seguridad y defensa», de los cuales tres son españoles, y añadió que espera que «muy pronto se acuerde la financiación de un proyecto importante de una empresa española», aunque no concretó cuál.
«Cada euro financiado por el BEI está contribuyendo a la seguridad de Europa porque la seguridad energética, la autonomía estratégica, el desarrollo tecnológico, la innovación y el liderazgo tecnológico son factores clave para la seguridad de Europa», recalcó Calviño.
La presidenta del BEI incidió en que se está produciendo una «expansión (…) de regímenes no democráticos en el mundo que están reforzándose desde el punto de vista de la preparación para la guerra».
Calviño dijo que en este contexto «es muy importante que las democracias se defiendan», pero subrayó que esa tarea «no es solo cuestión de inversiones en la industria de seguridad y de defensa».
«Se pone mucho el foco en las cuestiones financieras, en un porcentaje u otro, pero Europa dispone de recursos financieros para invertir en el ámbito de seguridad y defensa. Lo que tenemos es que avanzar en paralelo con la creación de una verdadera capacidad europea y autonomía estratégica europea en el ámbito de seguridad y defensa», explicó.
Esto pasa, abundó, por medidas como la puesta en marcha de sistemas de compra conjunta o la estandarización e interoperabilidad de los equipos en Europa y, «en definitiva, por tener una verdadera política integrada» en la materia.
En este sentido, hizo hincapié en que el BEI pondrá «todo de su parte» para desarrollar proyectos paneuropeos que contribuyan a esa capacidad común.
El banco público de la UE ha aumentado su inversión en defensa desde al año pasado y ha liado los ámbitos que puede financiar, que incluyen ahora las infraestructuras militares, programas de investigación y desarrollo, proyectos innovadores como la fabricación de drones, el apoyo a fondos de inversión especializados y la provisión de liquidez para pequeñas empresas europeas del sector.