El Corte Inglés cerró su ejercicio fiscal 2024/2025 —finalizado el pasado 29 de febrero— con un beneficio neto de 512 millones de euros, lo que supone un incremento del 6,7% respecto al año anterior, y una reducción de deuda de 263 millones.
La facturación total ascendió a 16.675 millones de euros, un 2% más en términos interanuales. Si se analiza la evolución por superficie comparable —esto es, descontando el efecto de cierres o aperturas—, el crecimiento fue aún mayor: un 4,3%.
Uno de los indicadores clave del periodo ha sido el margen bruto, que creció un 4,5%, apoyado especialmente en la evolución positiva de las marcas propias.
Este avance ha permitido reforzar la rentabilidad del negocio, en un contexto marcado por una fuerte presión sobre los costes y el consumo.
Por su parte, el resultado bruto de explotación (ebitda) se situó en 1.209 millones de euros, con un avance del 11,9% respecto al ejercicio anterior. Esta mejora refuerza la capacidad de generación de recursos del grupo, que sigue enfocado en aumentar la eficiencia operativa.
Desde la empresa destacan que todas las áreas de negocio han registrado avances, tanto en volumen como en rentabilidad. En particular, señalan la evolución del área de retail, el crecimiento de la división de seguros, y la consolidación de Viajes El Corte Inglés tras la integración con Logitravel.
El grupo ha insistido en su voluntad de seguir reduciendo deuda, fortalecer su posición financiera y mantener su apuesta por la innovación, el refuerzo de sus canales digitales y la diversificación de ingresos.