El euro se apreció este miércoles hasta rozar los 1,15 dólares, impulsado por los últimos datos de inflación en Estados Unidos y el clima más favorable tras la reanudación de las conversaciones comerciales entre Washington y Pekín.
La moneda europea se cambiaba hacia las 15:00 GMT a 1,1482 dólares, por encima de los 1,1432 dólares registrados al cierre del día anterior. El Banco Central Europeo (BCE) fijó hoy su cambio de referencia en 1,1433 dólares, reflejando una tendencia sostenida al alza.
La subida llega después de que se publicara que la inflación interanual en EE.UU. subió en mayo al 2,4 %, una décima por encima del dato de abril. Por su parte, la inflación subyacente (sin energía ni alimentos) se situó en 2,8 %, lo que ha generado ventas de dólares y compras de activos de riesgo, incluyendo el euro.
Este movimiento en los mercados se interpreta como una señal de que la Reserva Federal (Fed) tendrá más margen para bajar los tipos de interés. Según los datos de mercado, se descuenta ya una probabilidad del 60 % de que la Fed reduzca tipos dos veces antes de fin de año.
A este entorno favorable para el euro se suma la tregua alcanzada entre EE.UU. y China tras dos días de negociaciones en Londres. Ambas partes acordaron suavizar las restricciones a la exportación, en especial sobre tierras raras, lo que contribuyó a aliviar la tensión comercial global.
Durante la jornada, el euro se ha movido en una banda de fluctuación entre 1,1405 y 1,1488 dólares, consolidando su fortaleza frente al dólar y reforzando las perspectivas de estabilidad monetaria en la zona euro para los próximos meses.
