Las nuevas acciones desdobladas de Inditex, con un valor cinco veces más pequeño que las antiguas, es decir, 22,29 euros, aterrizaron con buen pie en el mercado, a cuya apertura registró crecimientos de en torno al 2%, aunque finalmente quedó un poco desinflado en el 0,87%, con 22,49 euros.
El mercado ha acogido por tanto con buenos ojos el ‘split’ de cinco títulos nuevos por cada uno antiguo que la compañía dirigida por Pablo Isla ha acometido con el objetivo de hacerlos más atractivos y operativos. Y es que la cotización del grupo llevaba varios meses atascado, por encima de los 100 euros, en valores muy alejados de los del resto de compañías de la Bolsa española.
En este sentido, la junta de accionistas busca dar un empujón a la cotización del valor después de siete meses de 2014 en los que ha experimentado una caída que actualmente es del 7%, pero que ha sido mayor en varios momentos en un mercado que acumula una subida del 10%. Con el split, el precio de los títulos baja (aunque también su valor) y abandona la intimidante cifra de tres dígitos, siempre más atractiva y manejable para los inversores.
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