La emancipación juvenil sigue en mínimos. Solo el 15,2% de los jóvenes entre 16 y 29 años vive fuera del hogar familiar, pese a que muchos cuentan con empleo. Para independizarse en solitario, deben destinar el 92% de su sueldo al pago de un alquiler, en un contexto de precios máximos históricos.
Son datos del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud correspondientes al segundo semestre de 2024. Aunque la tasa mejora ligeramente frente al semestre anterior (14,8%), es la peor cifra registrada para un segundo semestre desde 2006. En solo un año, hay 102.203 jóvenes menos viviendo fuera de casa.
El 57,9% de los jóvenes emancipados vive de alquiler y, de ellos, casi un tercio comparte piso. Al cierre de 2024, arrendar una vivienda costaba 1.080 euros mensuales de media, el valor más alto desde que hay registros.
El salario mediano juvenil subió un 11% interanual, situándose en 14.046,52 euros anuales, y el paro juvenil bajó al 19,1%. Sin embargo, estas mejoras no favorecen la emancipación, señala el informe, debido al alto coste de la vivienda.
Apenas el 26,4% de los jóvenes con empleo estaba emancipado. Más de siete de cada diez seguía en casa de sus padres. Además, el 18,8% de quienes trabajan se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión social. Entre los desempleados, la pobreza afecta a más del 50%, y en el conjunto de jóvenes, al 30%.
«La falta de acceso a la vivienda sigue siendo el principal freno para el desarrollo de un proyecto vital independiente», ha explicado Andrea González Henry, presidenta del Consejo de la Juventud, junto al investigador Manuel Mejías. Según ambos, esta situación perpetúa la precariedad, el sobreendeudamiento y el riesgo de pobreza.
Comprar una vivienda tampoco mejora el panorama. El precio medio de compraventa (197.210 euros) equivale a 14 años de salario juvenil, y se requieren 59.163 euros de entrada, es decir, cuatro años íntegros de sueldo.
Tener estudios tampoco garantiza independencia. El paro juvenil con estudios superiores se sitúa en el 13,4%, frente al 42,3% entre quienes solo tienen formación primaria, pero la dificultad para emanciparse se mantiene en ambos grupos debido al coste de la vivienda.
Por comunidades, Madrid (17,9 %) y Cataluña (17,6 %) lideran en emancipación juvenil, seguidas por la media estatal del 15,2 %. En el extremo opuesto, están Castilla-La Mancha (10,6 %) y Andalucía (12 %).
Madrid también destaca en ingresos: el salario neto mediano es de 17.563 euros anuales, frente a los 11.793 euros en Canarias.
Respecto al año anterior, Canarias y Cataluña han registrado los mayores descensos en la tasa de emancipación, mientras que Galicia y Cantabria anotaron ligeros repuntes.
Desde el Consejo de la Juventud exigen al Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana un canal estable de seguimiento para evaluar la evolución del problema. Reclaman también la aplicación efectiva de la Ley de Vivienda, la reforma del Bono Alquiler Joven para que llegue a toda la población juvenil, y la construcción de vivienda pública con un 40% destinada a jóvenes.