El emprendimiento en España encadena cuatro años consecutivos al alza, pero el ritmo podría ralentizarse si no se reactivan las motivaciones para lanzar nuevos proyectos. Esa es la principal alerta que lanza el informe GEM España 2024-2025, elaborado por el Observatorio del Emprendimiento de España (OEE).
El estudio confirma que en 2024, el porcentaje de personas al frente de proyectos recientes (menos de tres años y medio) subió al 7,2%, frente al 6,8% del año anterior. También hubo un ligero avance en los proyectos consolidados, del 6,7% al 6,8%.
Sin embargo, la intención de emprender no ha crecido: se mantiene en un 11,2%, la misma cifra que en 2023. Esto refleja que muchas personas interesadas en emprender no están dando el paso.
«La actividad emprendedora sigue aumentando, aunque se estanca la intención», resume Ana Fernández Laviada, presidenta del OEE.
El miedo al fracaso frena nuevas iniciativas
A escala global, el informe GEM detecta que el 49% de la población evita emprender por miedo al fracaso, frente al 44% de 2019. En España, la percepción del contexto ha mejorado ligeramente, sobre todo en aspectos como infraestructura y formación, pero persisten debilidades estructurales como el acceso a la financiación y el tamaño del mercado.
«La primera conclusión es que la actividad emprendedora reciente encadena cuatro años de crecimiento. La segunda, que el emprendimiento potencial se estanca en España», explica Nuria Calvo Babío, directora técnica de GEM España.
Según el informe, más del 70% de los emprendedores superan los 35 años. Un 10% cuenta con máster y un 11% con doctorado. Las mujeres emprenden más en el ámbito del consumo final (60%), mientras que los hombres se concentran en servicios a empresas (37%).
«Esta diferencia en el tipo de negocio condiciona el acceso a capital, la innovación, el empleo y la proyección internacional», señala Borja Cabezón, consejero delegado de Enisa.
Uno de los datos más contundentes del estudio es que la población extranjera residente en España triplica en intención de emprender a la española. En 2024, el 28,1% de las personas extranjeras declararon su intención de poner en marcha un negocio, frente al 11,2% nacional. Además, una de cada siete lo hizo realmente ese año.
Este dato refleja una oportunidad clara de refuerzo del ecosistema, si se logra ofrecer condiciones estables para consolidar sus negocios. Aunque emprenden más, solo una de cada trece personas extranjeras logra mantener su negocio más allá de los tres años y medio.
Tecnología e inteligencia artificial, sin brújula clara
El informe también detecta incertidumbre sobre el uso de la inteligencia artificial en el emprendimiento. Menos del 30% de los emprendedores iniciales en 36 de los 49 países analizados creen que la IA será «muy importante» en su negocio. En España, muchos reconocen que no tienen claro cuánto invertir, cómo usarla ni cómo protegerse frente a sus riesgos.
El contexto general mejora, pero la brecha entre intención y acción sigue siendo alta. Los expertos piden políticas públicas más efectivas y un acompañamiento real en las fases iniciales del emprendimiento.
«La apuesta por el emprendimiento como forma de vida es una gran noticia. Emprender es apostar por una España vanguardista, innovadora y social», resume Borja Cabezón.