En los próximos diez años, España perderá 5,3 millones de trabajadores por jubilación, mientras que solo 1,8 millones de jóvenes se incorporarán al mercado laboral, lo que cubrirá apenas un tercio de las salidas, según un informe de la Fundación Adecco.
El estudio advierte de que el reto demográfico se acelera y que la inmigración será clave para compensar la falta de relevo generacional.
En la próxima década se incorporarán al mercado laboral 1,82 millones de jóvenes que ahora tienen entre 6 y 15 años, una cifra muy inferior a los 5,31 millones de personas mayores de 55 años que abandonarán la actividad laboral.
El informe estima, además, que entre 2026 y 2035 llegarán a España 4,6 millones de inmigrantes, de los cuales un 80% estará en edad laboral y un 70% buscará empleo, lo que supone alrededor de 2,5 millones de personas.
«Debemos cualificar y recualificar al talento, autóctono y migrante, con políticas activas ambiciosas: formación digital y técnica, homologación ágil de títulos, acreditación de competencias y combatiendo la discriminación laboral», señala la Fundación Adecco.
El documento también subraya la necesidad de apostar por el talento sénior, con medidas para «retener y reenganchar» a los mayores de 50 años mediante fórmulas laborales flexibles.
«En un país con déficit de relevo, discriminar por edad es un completo contrasentido: implica prescindir de más del 35% de la población activa y desaprovechar experiencia y madurez», advierte la organización.
Además, el informe apunta que la expansión de la inteligencia artificial y la automatización transformará numerosos puestos de trabajo, mejorará la productividad y permitirá que la fuerza laboral existente cubra con mayor eficacia las necesidades del mercado.
