S&P Global Ratings estima que España crecerá un 2,6% en 2026, una cifra muy por encima de la media prevista para la eurozona, que apenas alcanzará el 0,8%. También superará con claridad a países como Bélgica (1%), Francia (0,6%), Italia (0,5%) o Alemania, que apenas avanzaría un 0,1%.
Para 2027, S&P espera que España mantenga un ritmo sólido, con un crecimiento del 1,8%, mientras que en 2025 lo sitúa en el 1,9%. Son cifras que reflejan un diferencial positivo respecto al conjunto de la zona euro, cuya recuperación será más gradual.
En cuanto a la inflación, la agencia proyecta una media del 2,2% en 2025 y del 1,9% en 2026 para España. Por su parte, la tasa de paro se iría reduciendo progresivamente, pasando del 10,6% en 2025 al 10,3% en 2026 y al 10,1% en 2027. Sin embargo, estas cifras siguen situándose muy por encima del entorno del 6% que se espera para el conjunto de la eurozona.
S&P también eleva sus previsiones para el bloque comunitario: calcula que el crecimiento de la eurozona se acelerará hasta el 1,1% en 2026 y el 1,4% en 2027, gracias a balances privados saneados, políticas fiscales más expansivas y un entorno de tipos de interés más bajos.
No obstante, la agencia advierte de varios riesgos que podrían alterar este escenario. Entre ellos, destacan las negociaciones comerciales entre EE.UU. y la UE, los efectos indirectos de los mercados financieros, la incertidumbre geopolítica y la falta de concreción en los planes fiscales nacionales.
En un escenario severo, marcado por nuevos aranceles, S&P advierte que el crecimiento de la eurozona podría reducirse un 0,4% entre 2025 y 2026.
