La actividad industrial en España volvió a crecer en mayo después de tres meses de contracción, en un contexto de recuperación de la confianza empresarial en la medida en que ha disminuido la incertidumbre en torno a los aranceles globales, propiciando un aumento de los stocks de compras y el empleo.
El índice PMI de actividad del sector manufacturero español del Hamburg Commercial Bank (HCOB) y S&P Global, publicado este lunes, marcó 50,5 puntos en mayo, 2,4 puntos por encima de la cifra de abril, con lo que se sitúa por encima del umbral de crecimiento (50 puntos) por primera vez desde enero.
No obstante, las dudas y la preocupación por las perspectivas económicas siguieron impulsando las ventas a la baja, aunque con mucha menor intensidad.
Los precios de compra disminuyeron por primera vez desde 2024 debido a una demanda aún débil, en tanto que las empresas redujeron sus propios precios ante las presiones competitivas.
Las empresas registraron un aumento en los pedidos pendientes, lo que llevó a aumentar la contratación de personal para hacer frente a las necesidades de producción por tercer mes consecutivo.
La compra de insumos en general se redujo por cuarto mes consecutivo, sin embargo, esta caída no impidió un aumento de los stocks de compra por primera vez desde octubre de 2024.
El economista junior de HCOB, Jonas Feldhusen, señala en el informe que «sigue siendo difícil determinar si esta mejora se vincula en parte a indicios tempranos de atenuación en el conflicto mundial por los aranceles».
