El Gobierno chino ha asegurado que respeta «la voluntad de las empresas», después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmara una orden ejecutiva que garantiza el funcionamiento de TikTok en el país norteamericano a partir de un acuerdo con China sobre el que Pekín apenas ha ofrecido detalles.
El portavoz de la Cancillería, Guo Jiakun, declaró en rueda de prensa que «el Gobierno chino respeta la voluntad de las empresas y las invita a llevar a cabo negociaciones comerciales basadas en las reglas del mercado».
Añadió que espera que «se alcance una solución que cumpla con las leyes y regulaciones chinas y logre un equilibrio de intereses».
Guo también expresó el deseo de Pekín de que Estados Unidos proporcione un entorno abierto, justo y no discriminatorio para las inversiones de empresas chinas en el país.
Por su parte, el vicepresidente estadounidense JD Vance señaló durante la firma de la orden ejecutiva que «hubo cierta resistencia por parte de China, pero nuestro objetivo principal era garantizar el funcionamiento de TikTok, a la vez que protegíamos la privacidad de los datos de los estadounidenses».
En 2024, el Congreso estadounidense aprobó que TikTok debía cesar su actividad en el país si no se establecía una sociedad local suficientemente desligada de ByteDance, la matriz china, especialmente en lo relativo al acceso a datos de usuarios.
Vance explicó que Oracle, que participará en la nueva sociedad operadora en EE.UU. valorada en unos 14.000 millones de dólares (12.000 millones de euros), ya almacenaba datos cuando ByteDance controlaba la aplicación en territorio norteamericano.
Pekín, sin embargo, no ha confirmado de forma explícita la existencia de un acuerdo, ni siquiera después de la conversación entre Trump y el presidente chino Xi Jinping la semana pasada. La postura contrasta con la rápida difusión de detalles por parte de la Casa Blanca.
Uno de los puntos decisivos sigue siendo el control del algoritmo de recomendaciones, considerado clave para el éxito de TikTok en Estados Unidos, donde cuenta con unos 150 millones de usuarios.
La legislación estadounidense de 2024 establece que cualquier «desinversión cualificada» debe impedir vínculos operativos con entidades controladas por un «adversario extranjero», lo que incluye el funcionamiento del algoritmo.
Sin embargo, la normativa de control de exportaciones de Pekín prohíbe a las empresas chinas vender algoritmos de su software, por lo que la operación debería ser aprobada expresamente por el Gobierno chino.
Tampoco ByteDance, con sede en Pekín, ha revelado detalles del posible acuerdo. «Seguiremos promoviendo los trabajos pertinentes para que la filial estadounidense de TikTok continúe prestando un buen servicio a la amplia base de usuarios en Estados Unidos», indicó la compañía el pasado fin de semana.
