Galp registró unos beneficios netos de 565 millones de euros en el primer semestre de 2025, lo que representa una caída del 9% respecto a los 624 millones obtenidos en el mismo periodo del año anterior.
No obstante, en el segundo trimestre (abril-junio), la petrolera portuguesa alcanzó 373 millones de euros, un 25% más interanual.
Según comunicó a la Comisión Nacional de Valores lusa, este crecimiento trimestral se produjo pese a «un entorno macroeconómico menos favorable y una significativa depreciación del dólar frente al euro».
La compañía subrayó que ha mantenido un sólido rendimiento operativo en todas sus áreas de negocio, lo que ha reforzado su situación financiera.
En los primeros seis meses del año, el ebitda cayó un 16%, hasta 1.509 millones de euros, mientras que la deuda neta aumentó un 22%, hasta 1.415 millones.
Por áreas, el ebitda en Upstream fue de 708 millones de euros (un 28% menos); en Industrial y Midstream, de 539 millones (+2%); en Comercial, de 163 millones (+15%); en Renovables, de 19 millones (+35%) y en el área Corporativa, de 1 millón (+64%).
Las inversiones netas (Capex) alcanzaron los 305 millones de euros, sin cambios respecto al primer semestre de 2024. Durante el segundo trimestre, se concentraron en proyectos de upstream, como el quinto pozo perforado en Namibia y actividades en Bacalhau (Brasil), así como en iniciativas de bajas emisiones en el complejo de Sines (Portugal) dentro del área Industrial y Midstream.