Delivery Hero, matriz alemana de Glovo, ha advertido en su informe del primer semestre que las sanciones y multas sobre la plataforma española de reparto generan una «incertidumbre significativa» sobre su continuidad en el mercado español.
El grupo estima que podría enfrentarse a sanciones en España de entre 520 y 860 millones de euros, vinculadas a cotizaciones a la Seguridad Social, recargos por pagos atrasados y reclamaciones de IVA, como consecuencia de su adaptación a la denominada Ley Rider. «Si estos riesgos se materializan de forma integral, dichos pagos podrían no ser cubiertos dentro de sus actividades operativas sin el apoyo financiero adicional de Delivery Hero», señala el informe.
Impacto de la Ley Rider
La Ley Rider entró en vigor en agosto de 2021, tras tres meses de plazo para que las empresas del sector se adaptaran a la normativa. La norma obliga a contratar a los repartidores como asalariados y pretende limitar el uso de falsos autónomos.
Las plataformas reaccionaron de manera desigual. Deliveroo abandonó España antes de su entrada en vigor, mientras que Just Eat y Ubereats recurrieron a empresas especializadas que garantizan la contratación laboral de los repartidores. Glovo, en cambio, mantuvo hasta este año un sistema basado en trabajadores autónomos.
Cambio de modelo
En julio de 2025, la empresa de reparto anunció la contratación de 14.000 repartidores para adaptarse a la normativa. El cambio llega en un momento en el que el sector continúa enfrentado por el modelo laboral. Just Eat España llegó a presentar una demanda contra Glovo en los juzgados de lo mercantil de Barcelona, por competencia desleal, en la que reclamaba 295 millones de euros.
El juzgado mercantil número 2 de Barcelona desestimó la demanda, al considerar que Glovo actuó dentro de la legalidad y que los repartidores mantenían autonomía suficiente en su actividad.
La advertencia de Delivery Hero refleja las tensiones que persisten en el reparto a domicilio tras cuatro años de aplicación de la Ley Rider. Con sanciones en curso y un mercado dominado por tres operadores, la evolución del modelo laboral sigue siendo uno de los principales desafíos para la sostenibilidad económica de este sector.