Juan José Hidalgo, presidente de Globalia y Air Europa, ha asegurado que su hijo, Javier Hidalgo, en su condición de consejero delegado, estaría dispuesto a dialogar con cualquier interlocutor con el objetivo de garantizar la supervivencia de la aerolínea.
La afirmación se produce en un contexto de debate público por el préstamo de 475 millones de euros concedido durante la pandemia.
El empresario ha defendido la legitimidad de la operación y ha subrayado que avaló personalmente el crédito con su patrimonio. «No sé con quién habló mi hijo, pero yo avalé este crédito con mis propias propiedades», ha señalado, en referencia a las informaciones que vinculan el préstamo con el entorno del presidente del Gobierno.
El papel del aval en la concesión del crédito
Hidalgo sostiene que su aval fue determinante para que Air Europa se convirtiera en la primera empresa en recibir fondos del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas (FASEE).
Según su versión, la existencia de garantías claras permitió acelerar el proceso frente a otros expedientes que quedaron bloqueados por falta de avales suficientes.
Desde su punto de vista, el respaldo patrimonial aportó seguridad a la operación y facilitó una tramitación más ágil en un contexto de urgencia marcado por el colapso del tráfico aéreo durante la pandemia.
Supervisión de la SEPI y viabilidad
El presidente de Globalia ha recordado que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) mantuvo una supervisión directa de Air Europa durante todo el periodo de vigencia del préstamo.
Representantes del organismo público formaron parte del consejo de administración hasta la cancelación total de la deuda.
Hidalgo ha destacado que la devolución anticipada del crédito, junto con más de 100 millones de euros en intereses, demuestra que el plan de viabilidad comprometido se ejecutó al 100% y sin desviaciones.
Inversiones estratégicas y saneamiento
El empresario ha puesto en valor la gestión de Javier Hidalgo al frente de la aerolínea, subrayando la entrada de nuevos socios estratégicos. Entre ellos, Turkish Airlines, que controla el 26% del capital de Air Europa, e International Airlines Group (IAG), que aportó 300 millones de euros a la compañía.
A estas operaciones se suma la venta de activos no estratégicos, como tres hoteles, que ha permitido avanzar en el saneamiento financiero tanto de Air Europa como de Globalia.
Sin deuda y sin fondos públicos
Hidalgo ha insistido en que el grupo ha quedado libre de deudas y que no se ha utilizado dinero de los contribuyentes. Según ha explicado, la necesidad de financiación estuvo directamente vinculada a las restricciones impuestas por los gobiernos durante la pandemia, que provocaron pérdidas acumuladas de 1.400 millones de euros.
Pese a la polémica mediática, el presidente de Globalia asegura que la aerolínea atraviesa un buen momento operativo, con altos niveles de ocupación, y considera que la exposición pública no ha perjudicado la evolución del negocio.
