La cadena de moda sueca Hennes and Mauritz (H&M) obtuvo un beneficio neto de 411 millones de euros en el primer semestre de su ejercicio fiscal (diciembre-mayo), lo que supone una caída del 28% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
El beneficio operativo se redujo un 22%, hasta 643 millones de euros, impactado por un menor margen bruto, la apreciación del dólar, el incremento de los costes de transporte y las inversiones en la oferta al cliente, según recoge el balance publicado por la compañía.
Las ventas ascendieron a 10.129 millones de euros, lo que representa un aumento del 1% en divisas locales, aunque un descenso del 1% en coronas suecas.
H&M prevé un crecimiento del 3% interanual en las ventas de junio, también calculado en divisas locales.
En el segundo trimestre (marzo-mayo), el beneficio neto fue de 358 millones de euros, un 22% menos.
Las ventas netas se situaron en 5.127 millones de euros, con un ligero aumento del 1% en divisas locales, aunque un retroceso del 5% en coronas suecas. El beneficio operativo en ese periodo cayó un 17%, hasta 535 millones de euros.
La compañía afirma que la composición de su inventario es adecuada y que, en el segundo trimestre, la evolución ha sido positiva, con un aumento del 1%, frente al 11% del trimestre anterior.
«En tiempos inciertos con consumidores prudentes, monitorizamos de forma estrecha la evolución macroeconómica y geopolítica, y adaptamos continuamente la oferta y el negocio para responder a las necesidades de los clientes de la mejor manera», indicó Daniel Ervér, consejero delegado.
Ervér añadió que la compañía tiene buenas oportunidades de crecimiento sostenible y rentable a largo plazo, gracias a su posición financiera, un plan claro y un sólido control de costes.
A cierre de mayo, H&M contaba con 4.166 tiendas, lo que supone un 4% menos que un año antes. La firma mantiene su intención de abrir sus primeras tiendas y lanzar ventas por internet en Brasil a principios del segundo semestre de su ejercicio fiscal.