Iberdrola anunció este miércoles que invertirá 58.000 millones de euros hasta 2028, un 30% más que en su plan anterior, con el foco en EE.UU. y Reino Unido para impulsar la electrificación y las nuevas necesidades de las redes eléctricas.
En su Capital Markets Day celebrado en Londres, la compañía indicó que el 85% de las inversiones se dirigirán a países con rating A y marcos regulatorios estables. Reino Unido se convierte en el principal destino, con 20.000 millones, seguido de EE.UU. con 16.000 millones, la Península Ibérica con 9.000 millones y Brasil con 7.000 millones.
Iberdrola prevé alcanzar un ebitda de 18.000 millones en 2028, 3.000 millones más que en 2024, con las redes como motor de crecimiento y una contribución estimada del 55%. El grupo quiere que el 75% de su ebitda no dependa de los precios energéticos.
La compañía también se fija un beneficio neto ajustado de 7.600 millones en 2028, frente a los 5.600 millones previstos en 2024.
Inversiones por áreas de negocio
Del total, 37.000 millones irán a redes: 25.000 millones a distribución y 12.000 millones a transporte. Esta estrategia permitirá situar la base de activos regulados en 70.000 millones de euros en 2028.
El área de renovables y clientes recibirá 21.000 millones de euros: el 38% a eólica marina, el 24% a eólica terrestre, el 10% a almacenamiento y otro 10% a solar. El 75% de estos proyectos está ya en construcción.
Además, la compañía ha completado una ampliación de capital de 5.000 millones y ejecuta un plan de rotación de activos y alianzas de 13.000 millones, de los que el 75% está cerrado.
Iberdrola destinará entre el 65% y el 75% del beneficio a dividendos, con un reparto estimado de 20.000 millones entre 2025 y 2028. El grupo fija un suelo de 0,64 euros por acción, dentro de su programa de retribución flexible que incluye recompra de títulos.