El Gobierno irlandés ha presentado un plan de infraestructuras valorado en 112.000 millones de euros para el periodo 2026-2030.
El programa, bautizado como Plan Nacional de Desarrollo (NDP), contempla actuaciones clave en vivienda, energía, agua y transporte, con el objetivo de paliar la escasez de viviendas y modernizar las redes públicas.
«Será la mayor inversión en infraestructura económica y social en la historia del Estado», afirmó Michéal Martin, primer ministro, al anunciar el plan. Solo en vivienda, el Ejecutivo prevé destinar 36.000 millones de euros para eliminar los obstáculos a la construcción y facilitar la participación del sector privado.
El objetivo es levantar más de 300.000 nuevas viviendas antes de que finalice la década.
Una parte sustancial de los fondos procede de ingresos extraordinarios. Entre ellos, los obtenidos por la venta final del banco AIB, nacionalizado tras la crisis financiera de 2008, y los 13.000 millones de euros que Apple devolvió al Estado tras una sentencia del Tribunal de Justicia de la UE que consideró ilegales sus beneficios fiscales.
En materia de transporte, el plan contempla 22.330 millones, incluyendo 2.000 millones para desarrollar la red de metro de Dublín, un proyecto largamente pospuesto desde 2005.
La inversión en infraestructura hídrica ascenderá a 7.680 millones, con el objetivo de modernizar el sistema de abastecimiento y saneamiento.
El Ejecutivo también prioriza sectores estratégicos como la energía renovable y las redes eléctricas, aunque los detalles se conocerán en próximas fases del plan.