La Comisión Europea ha abierto una investigación sobre la compra de Downtown Music por parte de Universal Music, ante el riesgo de que afecte a la competencia en el mercado europeo. La operación, valorada en 775 millones de dólares (unos 737 millones de euros), fue anunciada en diciembre de 2024 y ha generado preocupación en países como Países Bajos y Austria, que solicitaron su revisión. Si supera el escrutinio de los reguladores, la adquisición podría cerrarse en la segunda mitad de este año.
Aunque la operación no alcanzaba los niveles de facturación que hubieran exigido su notificación a las autoridades de Competencia de la Unión Europea, las empresas implicadas debieron solicitar permiso en Austria y Países Bajos, dado que superaban los límites establecidos en estos países. Países Bajos, donde Universal tiene su sede, pidió al Ejecutivo comunitario que evaluara la operación bajo las normas que permiten a Bruselas examinar fusiones que, aunque no sean relevantes a nivel comunitario, impactan el comercio en el mercado único y pueden amenazar la competencia en los territorios de los Estados que solicitan la revisión.
Con la inclusión de Austria en esta solicitud, la Comisión ha determinado que, «en base a la información disponible y sin perjuicio del resultado de su investigación completa», la transacción «cumple con los criterios» para ser analizada por el organismo. Según un comunicado, «en particular, la transacción amenaza con afectar de manera significativa a la competencia en ciertos mercados de la cadena de valor de la música donde ambas empresas están activas, en Austria y en Países Bajos, así como en muchos otros Estados miembros».
La Comisión ha concluido que está en una mejor posición para llevar a cabo esta revisión. Mientras tanto, Universal Music deberá notificar formalmente la compra y no podrá proceder con la transacción sin la autorización de Bruselas.