Lola Vilas sabe lo que es trabajar en sectores donde las mujeres son minoría. Por ello, uno de sus retos al frente de Uber es reducir la brecha de género que existe en el transporte profesional. Y aunque las cifras siguen siendo muy bajas, los avances en el último año son esperanzadores.
TOFF.- Estás en mitad de dos sectores típicamente masculinos, el tecnológico y el de los conductores, ¿qué papel representa la mujer en la compañía?
LV.- Tanto el sector tecnológico como el del transporte han sido tradicionalmente masculinos, pero eso está cambiando, y en Uber queremos ser parte activa de esa transformación. Para nosotros, la diversidad y la inclusión son pilares fundamentales de nuestra estrategia.
En Uber estamos comprometidos con reducir la brecha de género y convertirnos en una plataforma cada vez más accesible para las mujeres, ya sea como usuarias, como conductoras o en puestos de liderazgo dentro de la empresa.
A nivel interno, fomentamos la presencia femenina en todos los niveles de la compañía y trabajamos para visibilizar referentes femeninos que inspiren a nuevas generaciones. Sabemos que la diversidad enriquece cualquier organización y nos hace más fuertes como equipo.
Por otro lado, en cuanto a los conductores que utilizan nuestra plataforma para generar ingresos, queremos que cada vez más mujeres vean en Uber una oportunidad profesional viable, flexible y segura.
TOFF.- La cuota de mujeres conductoras, aunque empiezan a verse más, es significativamente bajo, ¿cuáles crees que son los motivos?
LV.- Hoy en día el 8% de los conductores que utilizan nuestra plataforma son mujeres, una cifra que, aunque todavía baja, supera con creces el 2% del transporte profesional. En el último año, el número de mujeres que conducen en Uber ha crecido un 60%, lo que demuestra que cada vez más mujeres están viendo en nuestra plataforma una oportunidad profesional atractiva.
Sabemos que todavía queda mucho camino por recorrer, pero creemos que estamos avanzando en la dirección adecuada. Nos motiva especialmente escuchar el testimonio de nuestras conductoras, quienes destacan la flexibilidad horaria, el contacto con las personas y la posibilidad de aumentar sus ingresos como algunos de los principales beneficios de trabajar con Uber. Además, muchas valoran la opción de trabajar en diferentes lugares, lo que les da una libertad que en otros sectores puede ser más difícil de encontrar.
TOFF.- A tu llegada a la compañía, ¿encontraste obstáculos por ser mujer? ¿Y apoyos?
LV.- A lo largo de mi carrera he trabajado en sectores donde la presencia femenina no siempre ha sido mayoritaria, y soy consciente de que todavía existen retos. Sin embargo, en Uber me encontré con un equipo que realmente apuesta por la diversidad y la igualdad de oportunidades.
Es cierto que, en industrias como la tecnología o el transporte, las mujeres seguimos siendo minoría, y por eso es clave seguir impulsando el cambio desde dentro. Lo importante es generar más oportunidades, visibilizar el talento femenino y demostrar que el liderazgo se basa en la capacidad, la visión y el compromiso.
Mi objetivo es que cada vez haya más mujeres en este sector, tanto dentro de Uber como en el ecosistema de la movilidad en general. Y eso se consigue con más referentes, más oportunidades y un entorno donde todas podamos desarrollarnos profesionalmente sin barreras.
TOFF.- ¿Y en tu vida profesional en general?
LV.- A lo largo de mi carrera he trabajado en sectores donde las mujeres hemos sido minoría, y eso, en algunos momentos, ha supuesto un reto. Es cierto que a veces hay que esforzarse un poco más para que te tomen en serio o para demostrar que puedes liderar igual que cualquier otro compañero. Pero, más que verlo como un obstáculo, siempre lo he afrontado como un desafío.
También he tenido la suerte de rodearme de equipos que han valorado mi trabajo y de contar con referentes que me han apoyado en mi desarrollo profesional. Lo importante es centrarse en aportar valor y en seguir abriendo camino para que cada vez más mujeres encuentren oportunidades en estos sectores.
TOFF.- ¿Crees que ser mujer ha influido en tu estilo de gestión?
LV.- Creo que el estilo de gestión está más marcado por la personalidad y la experiencia que por el género, y, en ese sentido, cada persona aporta una perspectiva diferente. En mi caso, siempre he apostado por un liderazgo basado en la colaboración, la cercanía y la escucha activa.
Es importante crear entornos en los que todos los miembros del equipo se sientan valorados y con la confianza de aportar ideas. También creo que la flexibilidad y la empatía son claves para gestionar equipos de manera eficaz, especialmente en sectores que están en constante cambio, como la movilidad y la tecnología.
Si ser mujer ha influido en mi forma de gestionar, probablemente sea en el sentido de que, como muchas otras mujeres, he aprendido a desenvolverme en entornos donde no siempre hemos sido mayoría. Y eso me ha dado una visión clara sobre la importancia de la diversidad y de construir equipos en los que todas las voces cuenten.
TOFF.- ¿Pesa más el cargo por tener nombre de mujer? ¿Te sientes más presionada u observada por ello?
LV.- Para mí, el liderazgo se basa en la capacidad, los resultados y la visión, sin distinciones de género. Mi enfoque está en hacer bien el trabajo, impulsar cambios positivos y seguir contribuyendo a que más mujeres accedan a estos espacios con total normalidad.
A medida que la diversidad en los puestos de responsabilidad siga creciendo, esta conversación será cada vez menos relevante. Y ese es el cambio que queremos impulsar, no solo en Uber, sino en el mundo laboral en general.
TOFF.- En la compañía, en el ámbito mundial, tenéis bastante paridad en la cúpula directiva, ¿cómo es la situación en España?
LV.- A nivel global Uber ha hecho un gran trabajo por alcanzar una mayor diversidad en el equipo directivo, y en España seguimos esa misma línea. Contamos con un equipo diverso, donde cada vez hay más mujeres en posiciones de liderazgo, y seguimos trabajando para que esta tendencia se consolide.
Sabemos que la diversidad no solo es una cuestión de equidad, sino también de valor para la compañía. Equipos más diversos toman mejores decisiones, aportan diferentes perspectivas y reflejan mejor a la sociedad para la que trabajamos día a día.
TOFF.- ¿Qué políticas de igualdad estáis desarrollando dentro de la compañía? ¿Crees que es necesario aplicar cuotas?
LV.- En Uber estamos trabajamos en diversas iniciativas para impulsar la igualdad de género y fomentar la presencia de mujeres en el sector de la movilidad. Un ejemplo claro es nuestro programa #GigSister, que busca visibilizar y apoyar a las mujeres conductoras, ofreciéndoles un espacio de comunidad y apoyo mutuo. Este programa ya ha celebrado varios encuentros en España, el último en Barcelona, reuniendo a conductoras para compartir experiencias y generar lazos dentro del sector.
También contamos con el programa Women@Uber, a través del cual seguimos impulsando iniciativas, como formaciones específicas enfocadas a derribar estereotipos y trabajar en contra del síndrome de la impostora, que al mismo tiempo ayuden a fortalecer la autoestima y el liderazgo de nuestras empleadas y colaboradoras.
Además, colaboramos con nuestro socio Moove Cars como parte del Compromiso Integra, una iniciativa que promueve la incorporación laboral de mujeres en riesgo de exclusión social, facilitándoles empleo como conductoras y ayudando a fomentar la igualdad de oportunidades en un sector tradicionalmente masculino. Desde el inicio de esta alianza, ya hemos integrado a más de 30 mujeres en España.
En cuanto a las cuotas, creo que lo importante es crear oportunidades reales y generar un entorno inclusivo en el que las mujeres quieran y puedan desarrollar su carrera en todos los niveles. El objetivo debe ser facilitar el acceso y eliminar las barreras que aún existen. En Uber trabajamos para que la movilidad sea un espacio en el que todas las personas, independientemente de su género, puedan encontrar una oportunidad laboral viable y atractiva.
TOFF.- ¿Has tenido que sacrificar vida privada para triunfar en la profesional?
LV.- Creo que cualquier persona que asume un rol de responsabilidad tiene que buscar ciertos equilibrios entre la vida profesional y personal.
No se trata de elegir entre una cosa u otra o de hacer sacrificios, sino de gestionar bien el tiempo y rodearse de equipos en los que puedas confiar. Creo que el éxito profesional no debería ir en contra de disfrutar de la vida personal, sino que ambas cosas tienen que complementarse.
TOFF.- ¿Qué consejo le darías a una mujer que quiere ser directiva de una empresa?
LV.- Le diría que confíe en sí misma y en su capacidad para liderar. Mi consejo es que no esperen a sentirse 100% listas para dar el paso: el aprendizaje viene con la experiencia.
También es clave rodearse de buenos equipos y buscar referentes que te inspiren. El liderazgo no es un camino solitario, y tener una red de apoyo, tanto dentro como fuera del trabajo, marca la diferencia.
Y, por último, que no tenga miedo de hacerse escuchar. En muchos sectores todavía hay barreras, pero el cambio se acelera cuando más mujeres ocupan puestos de liderazgo.
TOFF.- ¿Crees que las mujeres estamos bien representadas en el mundo empresarial? ¿Supone un desempeño extra ser mujer en el liderazgo de negocios?
LV.- Hemos avanzado mucho en los últimos años, pero todavía queda mucho por recorrer. Las mujeres estamos cada vez más presentes en el mundo empresarial y en puestos de liderazgo, pero la realidad es que en muchos sectores la mujer sigue siendo minoría. Aunque hay más referentes femeninos, todavía hay barreras, ya sea en forma de sesgos, techos de cristal o falta de visibilidad.
