La deuda pública se situó en los 1,098 billones hasta noviembre de 2016, registrando su valor más bajo en los últimos cinco meses, según los datos del Banco de España. Tras varios periodos consecutivos por encima de los 1,1 billones, el pasivo de las Administraciones rompió esta barrera hasta acercarse a niveles de mayo, cuando todavía rozaba los 1,08 billones. Las obligaciones del Estado se redujeron en 4.787 millones respecto a octubre, sumando dos meses consecutivos de caídas. En términos interanuales, la deuda se incrementó un 2,5% respecto a noviembre de 2015, cuando alcanzó los 1,072 billones, lo que suponen 26.000 millones menos. Con este descenso, la deuda vuelve a situarse por debajo del 100% del PIB, cercana al 99%, después de tres trimestres consecutivos superando esta barrera. El ajuste de las Administraciones tras la advertencia de Bruselas se hizo patente en una drástica reducción del pasivo cercana a los 9.000 millones desde septiembre, mes en el que alcanzó su máximo anual con 1,107 billones en cartera. La evolución de la deuda rompe así la tendencia registrada a finales del ejercicio anterior, cuando anotó sus mayores aumentos, aunque sigue muy lejos de regresar a los niveles de 2013, en los que todavía no se había superado el billón de euros. La mayor parte de las obligaciones están en forma de títulos a medio y largo plazo (76%), por un valor de 834.025 millones. Estos valores crecieron en 4.342 millones sólo en noviembre, y un 5,9% respecto al mismo mes del año anterior. La deuda en valores a corto plazo también se incrementó en 475 millones, hasta alcanzar los 81.175 millones. Sin embargo, la caída viene impulsada por la partida de créditos no comerciales y otros préstamos, que se redujo en 9.603 millones, hasta los 183.404 millones. 

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