El sector automotriz ha vivido una jornada negra en los mercados financieros después de que Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, reveló un impuesto de 25% sobre todo vehículo fabricado fuera del territorio nacional. Firmas como Porsche (-2,11%), Volkswagen (-2,13%) y otras automovilísticas extranjeras han experimentado una caída en bolsa. Esta política arancelaria se aplicará desde el próximo 2 de abril.
El gobierno de Trump justifica la medida como un esfuerzo por revitalizar la industria automovilística estadounidense y reducir la dependencia de importaciones. Se estima que estos aranceles podrían generar hasta 100.000 millones de dólares anuales en ingresos, pero también podrían provocar represalias comerciales de países como Alemania, Japón y Corea del Sur.
Los aranceles no solo influirán en los automóviles ensamblados por completo, sino también en varias piezas y partes determinadas, como motores, transmisiones y componentes eléctricos. Este ajuste podría elevar de manera notable el precio final para las personas compradoras, ya que la industria automovilística estadounidense depende ampliamente de elementos importados. En 2024, se registraron importaciones en productos de automoción por 474.000 millones de dólares, llegando principalmente desde México, Japón, Corea del Sur, Canadá y Alemania.
México y Canadá obtienen un alivio parcial en estos aranceles debido al acuerdo de libre comercio vigente con Estados Unidos, suscrito durante el primer periodo de Trump. No obstante, la exención únicamente se extiende a los componentes producidos dentro del país que se integren en vehículos ensamblados en México y Canadá. El secretario de Comercio, Howard Lutnick, confirmó que no se contemplan más excepciones, aunque los gravámenes serán «recíprocos menos severos» en determinadas situaciones.
Descontento europeo
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea ha expresado su pesar por la decisión de Estados Unidos de imponer aranceles a las exportaciones europeas de automóviles. «Como una gran potencia comercial y una comunidad fuerte de 27 Estados miembros, protegeremos a nuestros trabajadores, empresas y consumidores en toda la Unión Europea», añadió.
Por su parte, Trump afirma que la decisión funcionará como un estímulo para la reedificación industrial de Estados Unidos, afirmando: «Se te cobrará una tasa del 25%, pero si fabricas tu coche dentro del país, no habrá arancel». Según su perspectiva, estas tarifas seguirán impulsando un crecimiento que, en sus palabras, no se había presenciado con anterioridad a su llegada al poder, enfatizando que Estados Unidos estaba perdiendo todas sus fábricas.