Los precios del aceite de oliva, que llegaron a cifras récord, ahora están en proceso de estabilización, regresando a cifras más habituales, al menos en el corto y medio plazo. Después de una campaña con producción normal-alta, las expectativas se han visto favorecidas por las recientes lluvias.
Entre julio de 2022 y abril de 2024, los consumidores sufrieron un aumento de precios del 112,69%, teniendo que pagar hasta 15 euros por un litro de aceite virgen extra. Durante este mismo periodo, los agricultores experimentaron incrementos significativos en las cotizaciones en origen, alcanzando un tope de 8,98 euros por litro en enero de 2024.
En la actualidad, se nota una desaceleración en la subida interanual de los precios. El Índice de Precios al Consumidor muestra una disminución del 37,9 % en el precio del aceite de oliva desde marzo de 2024 hasta marzo de 2025. Según Infaoliva, las cotizaciones en origen han caído un 123,28 % desde mayo de 2024 hasta mayo de 2025, con el precio descendiendo a 3,35 euros por litro.
España, que es el mayor productor y exportador de aceite de oliva a nivel mundial, ha visto un aumento en su producción tras el retroceso por la sequía. En campañas anteriores, la producción se vio drásticamente afectada debido a la sequía y a los crecientes costos energéticos y de transporte, exacerbados por la guerra en Ucrania.
Con el fin de aliviar el impacto en los consumidores, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación eliminó temporalmente el IVA sobre el aceite de oliva y lo redujo al 4 % desde enero de 2025. El ministro Luis Planas mencionó que tenía «claro que el precio va a bajar, porque es una cuestión fluida de la oferta y la demanda».
En un seminario reciente, los especialistas coincidieron en que el mercado del aceite de oliva ha regresado a la «normalidad». La producción de la campaña 2024/25 se prevé en 1,407 millones de toneladas, recuperándose rápidamente gracias a la fidelidad de los consumidores.
Según Primitivo Fernández, director de la Asociación Nacional de Industriales Envasadores (Anierac), las ventas de aceite envasado han aumentado un 47,15 % en el primer semestre de 2025, alcanzando así niveles «pre-sequía».