La Comisión Europea ha solicitado a Microsoft, Google, Apple y Booking información sobre cómo monitorizan y aseguran que sus servicios no se utilizan para estafas financieras, en virtud de la nueva normativa sobre servicios digitales (DSA).
«Este es un paso esencial también para proteger a los usuarios de toda la UE de estas prácticas y para asegurar que las plataformas en la UE desempeñan su papel», indicó un portavoz comunitario en la rueda de prensa diaria de la Comisión.
La institución aclaró que se trata únicamente de una solicitud de información y no de la apertura de una investigación formal. La DSA, en vigor desde 2024, regula la actividad de plataformas digitales como comercios en línea, redes sociales o webs de reservas, con el fin de asegurar que actúan contra prácticas ilegales y refuercen su transparencia.
Las cuatro empresas forman parte de las designadas como «plataformas muy grandes» por la normativa, al superar el 10% de los 450 millones de consumidores de la UE. Para estas compañías se aplican requisitos más estrictos de vigilancia, gestión de riesgos, transparencia y auditorías.
Las plataformas tecnológicas deberán responder a la solicitud de la Comisión, que puede imponer una multa de hasta el 1% de la facturación anual si considera que la respuesta es incorrecta, engañosa o incompleta.
En caso de abrirse una investigación formal y detectarse un incumplimiento de la DSA, las sanciones podrían alcanzar el 6% de la facturación anual.
