El sector de la movilidad vive una transformación marcada por la economía colaborativa.
Momoven, la startup de Pablo Carceller y David Berbel, ha creado la primera plataforma que permite el alquiler de motos entre particulares, un modelo similar al del carsharing, pero enfocado en las dos ruedas.
La propuesta ofrece a los propietarios la posibilidad de rentabilizar sus vehículos cuando no los usan, mientras que los usuarios acceden a una moto de manera flexible y económica. Todo se gestiona de forma digital, con seguros incluidos y procesos verificados, lo que da confianza y seguridad a ambas partes.
El proyecto ha despertado interés en el ecosistema inversor. Momoven ha cerrado una ronda de financiación con el respaldo de Alex Márquez, piloto de MotoGP, y, recientemente, ha incorporado al cofundador de Hawkers, Javier Martínez, para impulsar su expansión internacional.
Estos movimientos refuerzan la estrategia de crecimiento en mercados clave de Europa y Latinoamérica.
Además, la compañía ha abierto en Madrid el primer centro autónomo de alquiler de motos, que digitaliza por completo el proceso: desde la reserva hasta la entrega del vehículo sin necesidad de contacto humano. Este avance posiciona a Momoven en la vanguardia de la movilidad compartida.
«Queremos que alquilar una moto sea tan sencillo como pedir un coche por una app», afirman desde Momoven. Una visión que conecta con la tendencia global de sharing economy, donde el acceso prima sobre la propiedad.
Con un mercado en alza y un modelo que combina digitalización, inversión y alianzas estratégicas, Momoven se consolida como un actor emergente en la movilidad sostenible y compartida, con ambición internacional.