Nik Storonsky, fundador y CEO de Revolut, podría recibir una de las mayores compensaciones vistas en Europa si la fintech británica alcanza una valoración de 150.000 millones de dólares.
Este plan recuerda al que impulsó Elon Musk en Tesla, basado en objetivos de crecimiento extremo y sin salario fijo.
Según avanzan medios especializados, Storonsky tiene un esquema de incentivos que le permitiría acceder a un bono valorado en más de 1.000 millones de dólares, siempre que se cumplan hitos exigentes vinculados a la evolución bursátil de la empresa.
El acuerdo fue aprobado por los accionistas hace años, pero solo se activaría si Revolut sale a bolsa y logra multiplicar por diez su valoración actual.
La fintech, especializada en banca digital y pagos internacionales, fue valorada por última vez en 33.000 millones de dólares en 2021. Desde entonces, Revolut ha diversificado servicios —incluyendo inversiones y criptomonedas— y se prepara para dar el salto definitivo a los mercados cotizados.
El plan de compensación está condicionado a que la empresa alcance determinadas metas de valoración a lo largo de una década. Una estructura inspirada en el paquete que Elon Musk acordó en 2018, cuando vinculó sus retribuciones a una serie de tramos bursátiles y objetivos financieros.
Revolut, fundada en 2015, cuenta con más de 40 millones de usuarios y presencia en más de 30 países. Aunque no ha confirmado oficialmente una fecha para su salida a bolsa, su volumen de negocio y su capacidad para atraer talento e inversores la sitúan como una de las candidatas más potentes del fintech europeo.