Onorato no es un loro cualquiera. Es un asistente con inteligencia artificial y computación emocional creado para acompañar a personas mayores que viven solas. Su misión es doble: ofrecer compañía y seguridad a quienes envejecen en casa, y dar tranquilidad a sus familiares a través de una app que monitoriza su estado.
Lo llaman tecnología emocional. Y no es marketing vacío. Onorato escanea el rostro, la voz y la postura de quien tiene delante para detectar si está feliz, triste o decaído. Con esa información adapta su comportamiento. Puede recordar medicamentos, avisar de visitas, detectar caídas o incluso cerrar un grifo olvidado.
Sus ocho funciones principales combinan lo práctico y lo afectivo: llamadas, recordatorios, control de temperatura corporal, alarmas, reconocimiento emocional, cámaras de seguridad, ejercicios cognitivos y gestión del hogar, desde compras hasta domótica básica. Todo con un diseño simpático que humaniza la tecnología.
En el interior hay un despliegue de sensores. Dos cámaras en los «ojos» —una térmica y otra convencional—, tres satélites inalámbricos pensados para baño, dormitorio y sala, además de sensores de audio y movimiento. Cada mañana, Onorato «saluda» analizando el estado físico y anímico del usuario, ajustando sus respuestas y recordatorios según lo que percibe.
A diferencia de un asistente como Alexa, que se limita a responder comandos, este loro aprende rutinas y se preocupa. Puede detectar que alguien lleva demasiado tiempo en el baño y enviar una alerta, o recordar con voz amable que empieza el programa favorito. Es más compañía que gadget.
Actualmente está en preventa en Kickstarter con varias opciones:
- Super Early Bird: 720€ (20 unidades)
- Early Bird: 900€ (30 unidades)
- Kickstarter Price: 1080€ (99 unidades)
Cuando llegue al mercado costará 1.800€, aunque la campaña ofrece hasta un 60% de descuento. Las ventas serán internacionales y el objetivo es colocar 3.500 unidades el primer año.
Pero detrás de este invento no solo hay tecnología. Hay una historia profundamente humana.
El loro que nació de la demencia de un padre
Pablo Mariñosa, fundador de Onorato AI, creó este proyecto movido por su experiencia personal. Su padre, Pedro, sufrió demencia durante tres años. Cada jueves, Pablo lo llevaba a su restaurante favorito en Sitges. Justo al lado había un balcón con un loro. Y hasta que el pájaro no le hablaba, Pedro no quería entrar a comer.
Una noche, ya ingresado en el hospital, Pedro le pidió a su hijo que le comprara un loro para hacerle compañía. «Si mi padre me pedía la luna, yo la bajaba. Pero en el hospital no iban a dejar entrar a un loro real», recuerda Pablo. Esa noche, mientras velaba su cama, se le ocurrió una idea: fabricar un loro con inteligencia artificial que pudiese acompañarlo siempre.
Pedro murió dos meses después, sin ver el proyecto terminado. Pero para Pablo, su padre le dejó una misión: crear algo que ayudara a otras personas mayores a sentirse menos solas y más seguras.
Intentó antes con otros dispositivos —relojes inteligentes, pizarras digitales—, pero su padre los rechazaba por sentirse vigilado. Con Onorato encontró el equilibrio: un objeto que no invade, que se percibe como compañía, no como control.
Un reconocimiento humanitario
El impacto social de Onorato no ha pasado desapercibido. Cruz Roja acaba de reconocerlo con el Premio Tecnología Humanitaria, que celebra proyectos que usan la innovación para mejorar la vida de las personas. El galardón se entregará el próximo 6 de marzo en el Mobile World Congress de Barcelona.
Para Pablo, es más que un premio. «Siento que mi padre me dejó esta misión. Onorato no es solo un asistente digital, es un puente contra la soledad no deseada».
Más que un gadget
En un mundo lleno de dispositivos conectados, Onorato se diferencia por su carga emocional y su narrativa humana. No se vende como un simple robot asistente, sino como un compañero que detecta emociones, ayuda con las tareas diarias y, sobre todo, acompaña de forma cálida.
Quizá ahí radica su fuerza: no intenta reemplazar el contacto humano, sino complementarlo. Permite que las personas mayores vivan de forma independiente y con dignidad, mientras sus familias reciben notificaciones y alertas desde la app móvil.
¿Será el futuro del cuidado de mayores un loro digital? De momento, la preventa en Kickstarter ya genera expectativa y muchos lo ven como una nueva forma de tecnología con alma.