La startup española Orbital Paradigm ha cerrado una ronda de financiación de 2 millones de euros con el respaldo de Akka, Demium Capital, Starburst e id4 Ventures.
La compañía, fundada por el ingeniero aeroespacial Francesco Cacciatore, desarrolla cápsulas de reentrada reutilizables y autónomas, diseñadas para recuperar materiales sensibles desde el espacio con precisión y sin daños.
El dispositivo principal de la compañía, llamado KID, está en la fase final de desarrollo y se espera que realice su primer vuelo orbital a finales de 2025. Su tecnología integra un escudo térmico cerámico, software de navegación propio y un sistema de recuperación marina autónoma.
Está especialmente diseñada para misiones de retorno que requieran transportar sustancias delicadas, como compuestos farmacéuticos o estructuras fabricadas en microgravedad.
Orbital Paradigm ya ha firmado cartas de intención (LOIs) con 18 empresas, que suponen acuerdos preliminares por valor de 81 millones de euros. El primer vuelo está vendido al 100 %, y el segundo ya tiene el 80 % reservado, lo que confirma el interés del mercado por soluciones logísticas espaciales de nueva generación.
Francesco Cacciatore, CEO de la startup, acumula más de 15 años de experiencia en la Agencia Espacial Europea (ESA), donde participó en misiones como Space Rider, MARCOPOLO‑R e INSPIRE. Su equipo está formado por profesionales procedentes de empresas como SENER, Deimos o startups deeptech, combinando experiencia en industria aeroespacial y agilidad tecnológica.
El mercado de la logística espacial podría alcanzar los 300.000 millones de euros en la próxima década. En este contexto, Orbital Paradigm quiere posicionarse como actor clave en una infraestructura «invisible pero esencial» para la nueva economía en órbita, según destaca Javier Desantes, CEO de Akka España.
Con esta ronda, la startup acelera su hoja de ruta para validar en vuelo su tecnología, fortalecer su red industrial y consolidar su presencia en el ecosistema espacial europeo.