Vincent Huguet, de Malt

El perfil

«Nunca tuve un plan maestro»

Vincent Huguet

CEO de Malt

Vincent acaba de aterrizar en Madrid. Se reúne con su equipo de España, en la sede que Malt tiene a escasos metros del Congreso de los Diputados. Su visita coincide con la presentación de resultados de la compañía en 2024, que constatan un crecimiento sostenido y la consolidación de la idea que Huguet puso en marcha hace ya una década.
«Si no te apasiona, no va a funcionar». Es el mensaje que deja Huguet a quienes valoran emprender.

¿Quién es Vincent Huguet?

Yo soy, primero, padre de 3 hijos, casado con una mexicana.

¿Y como emprendedor?

Hay una palabra que me gusta mucho y siempre me he guiado y es serendipity. Es saber cómo agarrar la oportunidad. Nunca he tenido un plan maestro ni en mi vida personal ni en la profesional, ni lo tengo todavía.

¿Qué oportunidad has sabido agarrar?

Me fui a México, sin preparar, trabajé allí, conocí a mi esposa.  Trabajaba en marketing en Nestlé y al final todo lo que he hecho en mi carrera ha sido en tecnología pero ligado a que las personas se encuentren porque yo creo mucho en eso, a mí me gusta hacer que la gente conecte entre ellos. Cuando me pasa, me enriquece.

Malt no es tu primera startup, ¿cómo nace la idea de emprender?

En los inicios de Internet, yo tenía un amigo y empezamos un sitio en Francia. Él venía de una familia de emprendedores pero yo no y eso, tal vez, me empujó.

¿Y la idea de esa primera empresa?

Hice eso porque tenía ganas de crear cosas, me gusta conectar y construir. Yo estaba en México, era el Día de la Madre y quería mandar flores a la mía, encontré un sitio en Francia que hacía eso y me dio la idea.

¿De qué tópicos huyes como emprendedor?

No creo en los emprendedores que ven un mercado, en Estados Unidos, por ejemplo, y dicen esta empresa tiene tanto valor, yo voy a hacer lo mismo. Eso lo haces con tu cerebro, no con tus tripas. Las cosas te tienen que llegar de manera aleatoria.

¿Cómo tomas la decisión de dejar el trabajo en una multinacional para iniciar una empresa propia?

Al inicio no dejé mi trabajo, lo hice paulatinamente. Pasé poco a poco al mundo del emprendedor. Tal vez no tenía la valentía pero lo hice poco a poco. Te enriquece también seguir en tu trabajo y aprendes cosas en una empresa grande. Me tomó tiempo hasta que creé Malt. Admiro mucho a los que se lanzan de inmediato, al acabar la universidad, (aunque tal vez es que sus padres son muy ricos), pero es un riesgo importante porque además necesitas tener conocimiento, una buena parte del éxito se compone de a quién reclutas, cómo lo manejas y si no lo has hecho antes, es difícil.
«Creo saber cómo agarrar la oportunidad»

¿Cuál fue tu inspiración a la hora de emprender?

Muy fácil, yo estuve muy inspirado por Airbnb.

¿Por qué Airbnb?

Te cuento mi historia, en 2009 yo fui uno de sus primeros anfitriones en París. Vi una publicidad de una empresa que entonces era pequeñita, eran solo 7 personas y recibí una pareja de Texas, que era su primera vez en Europa y tres semanas después, el equipo de Airbnb se comunica conmigo y me dice que vienen a Europa. Pidieron dormir en mi casa y pasamos un fin de semana juntos.

¿Y qué sacaste de ese fin de semana?

Fue una inspiración porque es un marketplace, como nosotros, el primero que puso a la comunidad en el centro. No empezaron por el cliente, si no por la comunidad, venían a ver a sus anfitriones, no a sus clientes. Ellos transformaron la visión de los marketplaces.

¿Qué retos y desafíos te planteaste?

Yo siempre he hecho empresas de tecnología y una cosa que aprendí es que no puedes hacer una empresa de tecnología no teniendo gente técnica en el equipo fundador. Todavía hay en Europa una cultura de gente que viene de negocio, de consultoría y está bien pero tienes que tener un equipo diverso, complementario. Yo creo que el éxito de Malt es porque los cofundadores eran totalmente diferentes a mi tanto a nivel de personalidad como de conocimientos.

¿Has pensado en volver a un trabajo de 9 a 5?

Eso me gustaría (entre risas). Siempre hay una oportunidad de que venga una empresa que quiera hacer una adquisición y la cuestión siempre es qué quiero hacer:  ¿Quiero ganar dinero a corto plazo con todo lo que he trabajado y asegurar o quiero seguir emprendiendo  y hacer la empresa a mi manera, con mi visión y con la gente que quiero trabajar? Hasta ahora ha ganado siempre la opción dos.

¿Es una opción rendirse?

Con los proyectos anteriores estuve unos años y en algún momento se pararon o hice otras cosas. No sé si eso es rendirse pero sí me permitió aprender mucho. Yo creo que esto es un maratón, no un sprint y tienes que tener pausas, hay momentos muy rápidos, otros menos pero en Europa necesitamos gente que esté para el largo plazo. Toma tiempo hacer cosas realmente buenas.

Emprender está lleno de sacrificios, ¿a qué no renunciarías por ninguna idea?

En ese maratón que es esto, algo que me ayudó a no quemarme fue tener familia. Empecé la empresa cuando tuve mi primer hijo.  La gente suele buscar seguridad, yo al revés, me dio idea de querer tener la flexibilidad de poder verlo cuando quisiera. Sabía que iba a trabajar mucho pero quería poder decidir yo cuándo trabajo. Después tuve gemelos y eso es muy complicado, me obligó a encontrar equilibrio y eso me ayudó a no estar 100% en la empresa. Yo creo que tienes que nutrirte fuera también, ir a exposiciones, museos, viajes pero también con tu familia. Cuando eres empresario y te apasiona, fácilmente podrías dejar el 99% del tiempo en la empresa.

¿Cómo te quitas el estrés del trabajo?

Me gusta recibir amigos en casa, me gusta cocinar, me gusta viajar y en París, cuando estoy allí, camino mucho.

¿Y en el día a día?

Ir andando a los sitios. Esos momentos me permiten pensar.

¿Cuál dirías que es tu plato estrella?

Conejo a la mostaza.

¿Qué te quita el sueño?

Siempre estoy pensando en mi equipo. Lo más difícil es tener gente que está involucrada, motivada, le gusta la empresa pero no van a escalar, no van a poder pasar al siguiente escalón. Es lo más difícil porque tienes la cercanía con esa gente.

¿Habrá algo después de Malt?

No lo sé, cuando empezamos no sabíamos dónde íbamos a llegar. Yo funciono así, tengo ese lado caótico o no planificador. Me pongo una misión pero no sé cuándo llegará el fin. Desde el inicio yo creo que Malt puede hacer una IPO y sería una buena posibilidad pero el objetivo financiero no es mi objetivo, yo quiero construir, es lo que disfruto y creo que estamos al inicio de la misión. No te sé decir pero me gusta la idea de no saber, si no me aburriría.

Como emprendedor, ¿qué consejo personal darías a alguien que quiera emprender?

Que sepa en qué se embarca y no hacer algo porque lo vio en otro sitio o su cerebro le dice que hay oportunidad, buscar algo que realmente quieras resolver. Si tú quieres mantener algo durante años tiene que ser algo que realmente te apasione. Si lo haces porque es tendencia o porque crees que vas a ganar más dinero, no es cierto. Si no te apasiona, no va a funcionar.