A pesar de los picos de volatilidad que asolan al mercado de renta variable en las últimas sesiones, cada vez más voces apuntan a que ha llegado el momento de entrar, siempre pensando en el largo plazo.
Es cierto que los riesgos siguen estando ahí. "Los inversores se encuentran en una situación complicada, en medio de dos riesgos contradictorios: una desaceleración de la economía global propiciada por los mercados emergentes y la perspectivade una próxima subida de tipos por parte de la Fed", indica Koesterich, consciente de que, bajo este escenario, "es comprensible que muchos inversores se vean tentados a abandonar la renta variable y otros activos de riesgo".
Aún así, y en logar de salir de los mercados, desde la firma consideran que los inversores deben ver esto como una oportunidad "para aprovechar los nichos de valor que han surgido", teniendo siempre en mente que la volatilidad va a continuar marcando las próximas sesiones.
"Tradicionalmente, los inversores han diversificado entre acciones y bonos como principales clases de activo para manejar sus riesgos", explica el experto que, sin embargo advierte que en momentos de sumo estrés, los activos tradicionales se mueven a la par, como ha quedado demostrado en los últimos eventos de shock en el mercado. "En otras palabras, invertir en lo que considerábamos hasta ahora una cartera diversificada puede producir resultados que no sean muy diferentes de una cartera toda de acciones o toda de bonos".
Inversión activa
En el entorno actual, Koesterich aconseja una inversión dinámica de la cartera, incluyendo un mix con exposición a fondos cotizados (ETFs) y a la mayor flexibilidad que ofrecen las estrategias sin restricciones para unos mercados de renta fija que se enfrentan al cambio en la política monetaria de la Fed. Para una rentabilidad extra, aconseja añadir bonos high yield y estrategias mixtas que incluyan también renta variable e inversiones alternativas.
El objetivo de los fondos de deuda sin restricciones suele ser generar una rentabilidad total, invirtiendo en las mejores ideas del gestor sin seguir un índice de referencia. Al contar con un abanico más amplio de estrategias, el gestor puede ir reduciendo o ampliando el riesgo de su cartera de una forma más flexible.
Respecto a la renta variable, apuesta por acciones globales de calidad capaces de mantener los pagos de dividendos frente a la volatilidad del mercado. Prefiere las acciones de mercados desarrollados, especialmente los europeos, ante una major prevision de la actividad económica en la region. En EEUU, consideran que los valores mejor posicionados para el cambio de la Fed son los blue chips relacionados con sectores cíclicos.
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