Renfe ha retirado temporalmente los cinco trenes Talgo Avril que cubrían el servicio Avlo entre Madrid y Barcelona, tras detectar fisuras en los sistemas de suspensión. La revisión preventiva no afecta a las frecuencias ni al número de servicios, según confirmó la operadora.
Los cinco S106, conocidos como Avril, fueron apartados progresivamente: tres a finales de julio y dos más este pasado fin de semana. Todos ellos habían sido sometidos a trabajos de sustitución de los boogies, el sistema de suspensión que ha generado las incidencias.
«La operación se mantiene con total seguridad», explican fuentes de Renfe, que garantiza el servicio con otros trenes hasta que se complete la revisión.
Las fisuras detectadas afectan especialmente al tramo entre Madrid y Calatayud, donde el desgaste y las vibraciones son más intensas.
A día de hoy, Renfe mantiene en operación 27 de los 30 trenes Avril adquiridos a Talgo. El contrato, firmado en 2016 por un total de 1.491 millones de euros, incluía también el mantenimiento de los convoyes.
El retraso en la entrega de los trenes, que deberían haber entrado en servicio en 2021 pero comenzaron a circular en 2023, supuso una penalización para Talgo de 116 millones de euros. Esta sanción impactó directamente en sus resultados, con unas pérdidas de 108 millones en 2024.
