La aerolínea irlandesa de bajo coste Ryanair recortará 1,2 millones de asientos en los aeropuertos regionales españoles para la temporada de verano de 2026, y cerrará todos sus vuelos a Asturias. La compañía exige a Aena una rebaja del 50% en las tasas aeroportuarias para mantener la conectividad en las regiones.
El anuncio fue realizado en Madrid por el consejero delegado de la aerolínea, Michael O’Leary, quien también avanzó un incremento de 600.000 plazas en Madrid, Barcelona y Palma de Mallorca.
Reestructuración del mapa de vuelos
Ryanair ya había anunciado un ajuste de un millón de plazas en septiembre, cifra que ahora eleva a 1,2 millones. Estos recortes se suman al millón de asientos reducido en la pasada temporada de invierno.
O’Leary ha instado a Aena a revertir la subida del 6% (0,68 céntimos) aprobada para 2026 y ha pedido reducir las tasas un 50% en los aeropuertos regionales para incentivar el tráfico. Mencionó especialmente los aeropuertos de Valladolid y Jerez de la Frontera, que ya fueron eliminados de la programación del verano pasado.
Durante el invierno de este año, Ryanair también retiró operaciones en Vigo y Tenerife Norte, y ahora suma Asturias a la lista de cierres para el verano de 2026.
Traslado de capacidad a otros mercados
Aunque ninguna de las rutas españolas registra pérdidas, la aerolínea destinará los 25 nuevos aviones que recibirá hasta febrero a aeropuertos más rentables. Según O’Leary, la compañía está trasladando capacidad hacia Marruecos, Italia, Croacia, Albania y Suecia, países donde los gobiernos están suprimiendo impuestos medioambientales y reduciendo tasas aeroportuarias.
En el caso de Francia, donde Ryanair también ha anunciado recortes, la situación es, en palabras del directivo, «igual de mala que en España».
Críticas al Gobierno y a Aena
O’Leary afirmó que Ryanair había presentado dos planes de crecimiento al Gobierno y a Aena, que incluían algunos de los aeropuertos ahora cerrados. De haberse aprobado, el tráfico habría crecido un 40% hasta alcanzar los 77 millones de pasajeros en 2030. Sin embargo, el Ejecutivo —según dijo— «ha decidido sacrificar el crecimiento potencial y la creación de empleo».
A su juicio, las regiones españolas podrían crecer si contaran con un Gobierno comprometido con la reducción de costes operativos para los vuelos regionales.
El directivo también pidió al ministro de Consumo, Pablo Bustinduy, que proteja a los consumidores frente al aumento de los sobreprecios de las agencias de viajes online y que respete la legislación europea, que —según recordó— «impide claramente a los gobiernos nacionales interferir en la fijación de precios de los asientos o del equipaje de mano».
Con este nuevo ajuste, Ryanair redefine su estrategia en España priorizando los mercados más competitivos y presionando a Aena para obtener condiciones más favorables en tasas y regulación.