Sánchez Asiaín: Las emotivas despedidas de tres amigos

El BBVA ha cerrado 2016 despidiendo a uno de sus grandes referentes en el último siglo. José Ángel Sánchez Asiaín, ex presidente de la entidad y actual presidente de la Fundación BBVA, falleció el pasado 31 de diciembre en Madrid a los 87 años de edad. El que fuera el motor pensante y el brazo ejecutivo del banco durante 16 años, ostentaba actualmente un cargo simbólico y estaba ligado al ámbito cultural a través de su colaboración con diversas academias. Desde el punto de vista personal que les unía, los tres amigos de Aiaín analizan la figura del histórico banquero.

UN MODELO DE BANQUERO

«José Ángel Sánchez Asiaín fue la figura que necesitaba la banca española para despertar, a partir de 1970. En su brillante trayectoria como Presidente del Banco de Bilbao, rompió con el oligopolio de los siete grandes bancos (con el lanzamiento de la primera OPA de la historia financiera española, sobre Banesto) culminó la primera gran fusión entre grandes bancos, para crear BBV, anticipó las consecuencias de la incorporación de España a Europa, lanzó al mercado productos que hoy forman parte de nuestras vidas (tarjetas de crédito, créditos al consumo, etc.) y modificó en profundidad los esquemas tradicionales de gobernanza que caracterizaban a la banca. Fue un gran banquero, un destacado y muy culto intelectual, un profundo innovador, una figura señera. Pero, por encima de todo ello, fue una persona ejemplar. Un modelo de banquero. Consiguió, a pesar de ser un conocido personaje, seguir siendo alguien entrañable, amable, cercano, motivador. Fue un honor haber trabajado a sus órdenes. Descanse en paz». Pedro Luis Uriarte, ex consejero delegado de BBV y BBVA (1994-2001) y miembro del consejo de Deusto Business School. ASIAÍN, TRES VIDAS EN UNA

“José Angel Sánchez Asiaín fue banquero, uno de los siete grandes. Presidente del Bilbao durante década y media y del BBV otros dos años. Antes hizo carrera bancaria de mérito en el servicio de estudios del banco y en la dirección general. Representó la meritocracia ilustrada al frente de un banco de familias de industriales. Asiaín venía de familia del comercio en Baracaldo (margen izquierda del Nervión), pasado por la Universidad de Deusto del padre Bernaola, que le recomendó a los del Banco como uno de los titulados más prometedores. Hizo realidad a la promesa para introducir en el banco modernidad, las técnicas comerciales y tecnológicas del último tercio del siglo XX: tarjetas de crédito, cajeros, segmentación de clientes, especialización… Pero su vida profesional no empieza y acaba en la banca, la actividad académica ocupa otra vida para Asiaín, como profesor en Deusto y catedrático de las universidades de Valladolid y Bilbao. Aunque su aporte decisivo radica en la historia financiera de la Guerra Civil, una obra capital y definitiva para entender esa etapa. Sin perder de vista su actividad en las reales academias de Políticas y Morales y de Historia. Una tercera vida se refiere a las instituciones civiles a las que dedicó tiempo y capacidades, desde el Patronato del Prado a la Fundación Cotec para la Tecnología y la Fundación para Ayuda contra la Droga. Asiaín fure hombre de la cultura a la que apoyó en sus diferentes manifestaciones desde el banco, desde la fundación BBV y a título personal. Quienes le conocieron de cerca y trabajaron con él destacan que era “un hombre de bien”, que sabía escuchar y dirigir. Trabajador, discreto y austero, con una vida coherente. Su mayor decepcion fue el fracaso de la OPA sobre Banesto, con malas consecuencias para el sistema financiero y político español”. Fernando González Urbaneja, periodista.

UNA GRAN PERDIDA

«Me piden que escriba una breve reseña sobre José Ángel  Sánchez Asiaín, recientemente fallecido. Pero, ¿cómo resumir en apenas unos párrafos su impactante carrera profesional en banca? Es harto imposible. Si acaso mencionar que estuvo con la mejor formación posible para una persona con inquietudes y en el momento adecuado para implementar los cambios necesarios en el sistema financiero español. Ahora precisamente lo deberíamos entender mejor, considerando el debate actual sobre la necesidad de “reinventar” el negocio bancario. Con todo, si me lo permiten, aquí me voy a centrar en mayor medida en su formación humanista. Desde su obra sobre “La financiación de la Guerra Civil” por la que recibió el Premio Nacional de Historia de España hasta el impulso que siempre supo dar a instituciones que presidió como la Fundación del Museo del Prado. Fue miembro de varias reales academias, destacando la de Historia, Bellas Artes, Ciencias Morales y Económico-Financieras. Sin olvidarnos de su participación activa en la lucha contra la drogadicción. Profesor, banquero y empresario: así se puede resumir su vida profesional. Pero compaginándola con inquietudes intelectuales y sociales. Es una gran pérdida sin duda en tiempos tan complicados como los actuales». José Luis Martínez Campuzano (portavoz de la Asociación Española de Banca).

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