El grupo vasco Ternua, al que pertenecen las marcas de ropa de montaña y deportiva Ternua, Astore y Lorpen, además de Loreak Mendian, de moda urbana, ha presentado este viernes concurso de acreedores voluntario tras cerrar su último ejercicio con una deuda de 16 millones de euros.
Ternua Group, que tiene su sede en Arrasate (Gipuzkoa) y da empleo a 180 trabajadores, ha informado en un comunicado de que ha presentado el concurso de acreedores voluntario ante el Juzgado de lo Mercantil número 2 de San Sebastián, con una oferta vinculante para Loreak Mendian.
«El crítico momento por el que está atravesando el sector textil a nivel mundial y que ha puesto en jaque a primeras firmas internacionales tras un ajuste de mercado tremendo y sin precedentes, ha impactado duramente en la compañía motivando esta situación», explica.
La compañía, que cuenta con una planta de producción en Etxalar (Navarra) y 28 puntos de venta gestionados directamente –entre tiendas monomarca y espacios en otros comercios–, lleva desde 2023 «en una situación delicada», ya que cerró ese ejercicio con unos ingresos que superaron los 34 millones de euros, «pero con resultado negativo y un progresivo aumento de la deuda».
Intentó hacer frente a la situación con la refinanciación de la deuda, la optimización de su estructura y gasto, y el impulso de la inversión y el crecimiento, pese a lo cual el grupo «no ha encontrado el respaldo y la complicidad de un mercado que ha experimentado una caída notable y continuada en el consumo de productos outdoor, especialmente desde el segundo semestre del 2022».
Ahora, la compañía pasará a ser dirigida por un administrador concursal, como establece la ley, que será quien tome las decisiones sobre el futuro de las unidades productivas y las ofertas que pudieran llegar por ellas, y de los trabajadores.
El magistrado del Juzgado de lo Mercantil número 2 de San Sebastián debe resolver en el plazo de un mes sobre la oferta vinculante para Loreak Mendian que lleva aparejada el concurso de acreedores.