Donald Trump, presidente de Estados Unidos, tiene previsto anunciar durante este martes una inversión de 70.000 millones de dólares en los sectores de inteligencia artificial y energía en el estado de Pensilvania.
El anuncio tendrá lugar durante la Cumbre de Energía e Innovación en la Universidad Carnegie Mellon, en Pittsburgh, según ha adelantado el diario Axios.
Junto al senador republicano por Pensilvania, Dave McCormick, Trump revelará una iniciativa que busca transformar el panorama industrial del estado. Según los organizadores del evento, la inversión incluye centros de datos, generación energética e infraestructura de red, así como programas de formación en IA y aprendizaje para empresas.
McCormick destacará que se trata del «mayor compromiso de inversión en estas industrias en términos de dólares y empleos creados en la historia de la Commonwealth». Uno de los proyectos más emblemáticos se ubicará en Aliquippa, una antigua ciudad siderúrgica del valle de Ohio que ahora aspira a convertirse en un nuevo hub tecnológico.
En su perfil en X , McCormick adelantó que estas inversiones están diseñadas para generar «empleos bien remunerados, independencia energética y una revolución en inteligencia artificial».
Big things are happening this week in PA. Tomorrow, our inaugural Pennsylvania Energy and Innovation Summit will showcase all that is great about our Commonwealth and will spotlight incredible investments that will fuel good-paying jobs, energy independence, and the AI… https://t.co/tETyOQQ6Rq
— Senator Dave McCormick (@SenMcCormickPA) July 14, 2025
Alianza política, tecnológica y financiera
Se espera que a la cumbre asistan ejecutivos de grandes compañías como Darren Woods (ExxonMobil), Mike Wirth (Chevron), Larry Fink (BlackRock), Alex Karp (Palantir) y Dario Amodel (Anthropic).
También acudirán representantes del Gobierno y del ámbito institucional, como Scott Bessent, secretario del Tesoro; Josh Shapiro, gobernador de Pensilvania; y Howard Lutnick, secretario de Comercio.
La apuesta de Trump por relanzar Pensilvania como centro neurálgico de innovación tecnológica y energética refuerza su estrategia para reindustrializar zonas clave de EE. UU., en un contexto marcado por la competición global por el liderazgo en IA.