El magnate Elon Musk, al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), ha hecho una revisión significativa a la baja en la proyección de ahorros que esta oficina generará para el gobierno de Estados Unidos, fijando la cifra en 150.000 millones de dólares. Esta cantidad es sensiblemente inferior a la estimación inicial de un billón de dólares que Musk había compartido en una entrevista con un medio estadounidense.
En una reciente reunión del gabinete del presidente Donald Trump, Musk mostró su satisfacción con esta nueva proyección. «Me complace anunciar que en el año fiscal 2026 prevemos un ahorro de 150.000 millones de dólares gracias a la reducción del despilfarro y el fraude», declaró. Esta afirmación se enmarca en una sesión donde Musk, aunque no lidera un departamento, participó activamente.
El presidente Trump nombró a Musk para el DOGE con el objetivo de reducir el gasto público, modernizar la tecnología federal y mejorar la eficiencia de la administración pública. La orden ejecutiva que instauró esta oficina establece que su misión debe finalizar el cuatro de julio de 2026, en coincidencia con el 250 aniversario de la independencia de Estados Unidos.
Musk destacó durante la reunión que la colaboración con el gabinete está siendo productiva para alcanzar estos ahorros. «Estamos teniendo una excelente colaboración con el gabinete para lograr estos ahorros. Se traducirán en mejores servicios para el pueblo estadounidense. Vamos a gastar el dinero de los impuestos de una forma buena y sensata», enfatizó el consejero delegado de Tesla y Space X.
Bajo la dirección de Musk, el DOGE ha tomado medidas drásticas para reducir costes, incluyendo el despido de miles de trabajadores federales y el cierre de agencias históricas, como USAID, la principal agencia de cooperación mundial. Estas acciones son parte del plan para lograr la eficiencia presupuestaria esperada.
La noticia de Musk llega en un momento en que varios secretarios de la Administración Trump han agradecido públicamente su labor al frente del DOGE en los últimos meses. Este apoyo sugiere una aceptación interna de las iniciativas de reducción de costes y modernización que impulsa Musk.