El PIB de Estados Unidos cayó un 3,5% en 2020 y solo en el primer trimestre de este año se recuperó en un 1,6%. Todo apunta a que en 2021 se recuperará lo perdido durante el año de la pandemia. La recuperación se muestra fuerte en el país norteamericano, pero el empleo es la gran asignatura pendiente. La tasa de desempleo se sitúa en el 5,9% y todavía sigue habiendo 8 millones menos de puestos de trabajo que en febrero de 2020. “Yo calculo que para final de año la tasa podría quedarse en un 4,4%”, asegura el analista José María Lerma.
En caso de terminar el año en el 4,4% todavía seguiría un punto por encima del nivel previo a la pandemia. Es decir, se tardarían más de 20 meses, en el mejor de los casos, en recuperar el nivel de empleo del inicio del 2020. Aunque, la Reserva Federal ya ha asegurado que esperar un crecimiento paulatino y una recuperación de los puestos de trabajo también los siguientes meses para consolidar la recuperación económica del país.
“La ralentización de la creación de empleo en Estados Unidos contradice todo lo que sabemos (o creemos saber) sobre la economía. El fuerte estímulo fiscal y monetario, una rápida campaña de vacunación, alto volumen de ahorro y beneficios financieros, todo apunta a una aceleración de la actividad y el empleo”, señala Bruno Cavalier, economista jefe en ODDO BHF.
¿Por qué?
La pregunta que cabe hacerse es porqué se está produciendo está ralentización en la recuperación. Lo cierto es que no hay un único motivo. Jerome Powell explicaba que una de las razones es que el cierre de numerosos colegios a lo largo y ancho de la geografía del país había hecho que los padres de esos niños pospusieran su vuelta al mercado laboral.
En este sentido, según Cavalier, también influyen las altas prestaciones que se están pagando a quienes se quedaron sin empleo. Actualmente, los que perdieron su puesto de trabajo con la llegada de la pandemia están recibiendo una ayuda de 300 dólares semanales, es decir de 1.200 dólares al mes. Esto está haciendo que se ralentice la búsqueda de trabajo. Sin embargo, a partir de septiembre esta ayuda finaliza, aunque algunos estados como Florida o Texas ya han abandonado el programa para estimular el empleo.
“De los 8 millones de empleados que faltan en relación con los niveles anteriores a la crisis, el 18% sigue esperando a ser llamado por su anterior jefe y el 46% no ha empezado a buscar trabajo”, comenta el economista jefe de ODDO. “Las ayudas a los parados han sido excepcionales, tanto por el número de afectados como por la cuantía de las prestaciones abonadas”, añade.
Las presiones inflacionistas durarán “uno o dos trimestres como máximo”
La recuperación no llegará hasta 2022
1970-01-01 00:00:00