El Índice de Precios de Vivienda (IPV) que realiza el INE acumula ya tres años en positivo tras seis periodos registrando descensos. En el cuarto trimestre de 2016, último periodo del que hay datos, el índice quedó en los 70,75 puntos, un dato que no se veía desde 2012. La tasa de crecimiento en este último trimestre del año fue del 4,5%, el segundo dato más alto desde las cifras registradas en 2007 y solo superado por el 6,3% que se registró en el primer trimestre de 2016. Por tipo de vivienda, existe poca diferencia entre el aumento en los precios de las viviendas nuevas y las usadas, ya que registran tasas de crecimiento del 4,3% y del 4,5%, respectivamente. Sin embargo, este dato supone que la tasa anual de la vivienda nueva ha retrocedido tres puntos con respecto al tercer trimestre del año, mientras que la usada se encarece un punto más. 
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